El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) del centro de investigaciones económicas Fedesarrollo se realiza desde noviembre de 2001. Y en abril pasado, es decir 221 meses después, tuvo su peor resultado desde que se evalúa, al ubicarse en -41,3 %.
Según Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, este resultado refleja “el tamaño del choque” que el país está sufriendo por cuenta de la emergencia del Covid-19.
Y como no podía ser de otra manera, el impacto del que habla Mejía se sintió también sobre los medellinenses, cuyo indicador se ubicó en -43,4 %, que significó una caída de 20,2 puntos básicos frente a marzo.
“Lo que está sucediendo afecta gravemente la confianza del consumidor. Parecía que el rebote (recuperación en la curva de evolución económica) del coronavirus iba a ser rápido, pero estamos viendo que la demanda interna se va a contraer radicalmente y va a afectar el crecimiento. El consumo se pierde y ya no vuelve”, apunta Óscar Eduardo Medina, docente de la Universidad Eafit (ver Paréntesis).
Y es que, al observar las cifras del mes en cuestión, los paisas encuestados en la medición se mostraron reacios a, por ejemplo, comprar vivienda, pues en este aspecto la percepción cayó a -57,5 %, que aún así está por debajo de lo que se observó en Bucaramanga (-78,5 %), Bogotá (-64 %) o Barranquilla (-62,8 %), por ejemplo.
El hecho de que la perspectiva sobre comprar casa a futuro y sobre la economía en general haya tenido una disminución histórica, hace pensar al equipo de Investigaciones Económicas de Bancolombia que “es una alerta en torno la caída que habría sufrido la cantidad de ocupados en el mercado laboral urbano en abril”.
Según los expertos de la entidad financiera, los hogares habrían incorporado en su visión que las implicaciones de la contingencia actual “serán muy relevantes en la dinámica productiva de los próximos meses, pero mantienen el optimismo en torno a la situación que estarán enfrentando en abril de 2021”.
Este último apunte de los investigadores de Bancolombia es por cuenta del planteamiento de si en 12 meses los colombianos creen que las condiciones económicas serán mejores, que se ubicó en -16,5 %, cifra que, si bien es negativa, no lo es tanto como el indicador de percepción sobre la actualidad.