Las comisiones económicas conjuntas del Congreso de la República aprobaron el núcleo de la reforma tributaria, aunque a esta hora todavía se está discutiendo parte del articulado.
Los congresistas le dieron el aval al impuesto a la riqueza y sus tarifas, a la sobretasa al impuesto del Cree y el aumento gradual de dicha sobretasa hasta el 2018 y avalaron que el 4x1.000 se mantenga hasta el 2019 y a partir de ahí empiece su desmonte.
Los congresistas avalaron que el impuesto a la riqueza desaparezca en el 2018 y la modificación de la tarifa máxima que pagarán las empresas con patrimonio de más de $5 mil millones, que será 1,3% en 2015, 1% en 2016, 0,75% en 2017 y desaparece en 2018.
El impuesto a la riqueza no desaparecerá para las personas naturales. Sin embargo, para las personas que tienen patrimonios líquidos entre $1.000 y $2.000 millones (el umbral menor), se reduce la tarifa del 0,25% a 0,125%.
Para compensar la disminución en recaudo por cuenta de la eliminación del impuesto a la riqueza en empresas, quedó establecido que la sobretasa al Cree, que grava las utilidades de las empresas, irá aumentando hasta el 2018, será del 4% en 2015, 6% en 2016, 7% en 2017 y 9% en 2018. Esta sobretasa se sumará la tasa del 9% que ya existe.
La sobretasa solo aplica para aquellas empresas que tengan utilidades superiores a $800 millones al año, es decir que los que tengan ganancias por un monto inferior no tendrán la sobretasa.
Por otra parte, las comisiones económicas conjuntas pidieron que se eliminara el artículo 39 de la reforma tributaria, en el que se creaba el delito penal para los evasores.
La discusión se abrió por varias proposiciones de congresistas que pidieron se eliminara la cárcel.
Así, se eliminó el artículo de la reforma. Sin embargo, se dejó abierto el debate para “multas administrativas” o de otro tipo.
Con esta reforma tributaria se prolonga de manera permanente el noveno punto del Cree, que está vigente actualmente, y con el que se recauda $1 billón aproximadamente.
