La transformación estratégica de su negocio energético y de concesiones así como la rentabilidad en cementos son lo que Grupo Argos considera sus claves para romper récords: las ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización, es decir el Ebitda, sumaron 4,8 billones de pesos, una tasa de crecimiento del 21 %.
Para facilitar el entendimiento sobre su relevancia, Luis Fernando Ramírez, investigador económico de la Universidad Sergio Arboleda, explica que el Ebitda “es un indicador estratégico, porque muestra las ganancias reales. Indica el verdadero impacto de la operación de la compañía (...) entonces, dependiendo en cómo la empresa sea gerenciada, queda un porcentaje adicional (después de las deducciones) que puede ser repartido entre los accionistas”.
De hecho, esa muestra del desempeño eficiente se refleja aún más al conocer que las utilidades netas del Grupo llegaron a 1,3 billones de pesos, los de la controladora fueron 690.000 millones, y el Conglomerado logró unos ingresos consolidados de 16,8 billones de pesos, con una variación al alza de 18 %.
“Nos complace presentar resultados con crecimientos de doble dígito en ingresos y ebitda que reflejan una ejecución coordinada, disciplinada y coherente como grupo empresarial”, afirmó Jorge Mario Velásquez, presidente de Grupo Argos.
Si usted es accionista es importante que sepa que el Grupo pone a disposición de la Asamblea 489.239 millones de pesos, de los que se planean destinar 6.500 millones de pesos a responsabilidad social, guardar 160.422 millones para futuras inversiones y repartir 322.317 millones de pesos, siempre que se apruebe en la reunión anual, que será el 26 de marzo de 2020.
¿Entonces cuánto le queda? la propuesta es repartir un dividendo de 376 pesos por cada una de las 857.227.180 acciones (75,29 % títulos ordinarios y 24,71 % preferenciales). El pago se realizarían en julio y octubre de 2020 y enero de 2021 (ver Radiografía).