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Inflación a la baja tiene la vía despejada, por ahora
Analistas de mercado esperan que el índice de precios termine por encima de 4 % y no se cumpla el rango meta del Emisor.
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Los servicios públicos regulados generaron presión al alza en la inflación de mayo. Se espera que el clima ayude. FOTO JUAN Sánchez
A dos semanas de finalizar el primer semestre de 2017, los precios de la canasta familiar muestran una tendencia a la baja en todo el país, indicándole al Banco de la República que la inflación a finales del año podría acercarse al 4 %, es decir, el techo del rango meta del Emisor (entre 2 % y 4 %).
Sin embargo, analistas consultados por el diario El País de Cali consideran que el rango meta no se cumplirá. Por ejemplo, el jefe de estudios de Ultraserfinco, Alejandro Reyes, proyecta que al finalizar este año, la inflación estará en 4,3 %. Igual proyecta el director de estudios económicos de Credicorp Capital, Daniel Velandia, quien estima una inflación de 4,3 % y “que si no hubiera sido por la reforma tributaria, este indicador podrá cerrar en 3,8 %”.
Es de anotar que en las minutas de junio del Banco de la República, en los que se tuvo detalles de la última reunión de junta del Emisor, los regulados generaron presiones al alza, que compensaron el descenso den la inflación de alimentos.
“Las expectativas de inflación obtenidas a partir de la encuesta a analistas financieros aumentaron ligeramente para el final de 2017 ”, se resalta en las minutas.
Al cierre de mayo, la inflación se situó en 3,23 %, frente a igual periodo del año anterior, cuando fue de 4,60 %.
Paro no afectó precios
Los analistas indicaron que el paro cívico en Buenaventura, que duró 21 días hasta el pasado 6 de junio, encareció ciertos procesos productivos, pero no registró impacto significativo en los precios.
“Tal vez el insumo o producto que más se importa por Buenaventura, que es el maíz, pudo tener un impacto indirecto en los precios del pollo o o del huevo, pero si no se reportó en mayo, no deberíamos tener mayores inconvenientes”, puntualizó Velandia.
Tampoco hubo encarecimiento de precios por el paro de maestros, dijeron los expertos.
En cuanto al riesgo de una alteración de la inflación por una fluctuación de la tasa de cambio, “si esta subiera a 3.500 pesos podría llevar al traste los precios, pero a mi juicio esa posibilidad no se ve en el horizonte”, resaltó por su parte Mauricio Reina, investigador de Fedesarrollo.
Así mismo, aunque el dólar está rondando los 3.000 pesos, este lleva más de un año así, lo que significa que el impacto sobre los precios ya se dio entre 2014 y 2015.
Velandia también comentó que el panorama podría ser afectado por el clima, pero sería temporal, como sucedió en el 2016. “Tendríamos unos meses altos en precios, pero rápidamente bajarían”, precisó, al tiempo que insistió en que dada la actual debilidad de la economía, el país no va a tener mayores presiones en la inflación en próximos meses, por lo que se espera tranquilidad. Esto con el objetivo de impulsar el crecimiento de la economía del país. Se espera que la inflación alcance el 3% a finales del 2018 .
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