Óscar de Jesús Hurtado Pérez es descrito como un hombre reservado y de bajo perfil. Quienes lo conocen desde joven lo recuerdan como un político poco dado a la confrontación pública, más inclinado a tejer relaciones en silencio y a avanzar sin hacer ruido. Con ese estilo, pasó de un origen campesino a convertirse en una de las figuras más influyentes de Tarso, su municipio natal, hasta el punto de que hoy su apellido se asocia con poder político y expansión patrimonial. Además, actualmente oficia como codirector de ISA Interchile y contralor de la Cooperativa de Caficultores de los Andes.
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Ese temperamento, discreto pero constante, marcó también el ascenso de su familia. En una investigación de EL COLOMBIANO, habitantes de Tarso señalaron que los Hurtado dejaron atrás la vida rural para consolidarse como un clan dominante. Según relataron, en casi cualquier punto del municipio aparecen fincas o lotes vinculados a alguno de los 13 hermanos o a familiares cercanos. A ello se suman otros predios que, aunque no figuran formalmente a su nombre, se atribuyen a ese núcleo familiar.
Óscar de Jesús Hurtado: El ascenso político “a nado de perro”
El despegue político de Hurtado se dio de manera gradual y discreta, lo que en el lenguaje local se describe como un ascenso “a nado de perro”.
Su primera aparición pública fue en la Asamblea Constituyente de Tarso, creada en 2001 como respuesta comunitaria al conflicto armado. Algunos críticos sostienen que supo capitalizar ese proceso social para proyectarse luego al Concejo y, más adelante, a la Alcaldía.
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Desde el ámbito local dio el salto al escenario nacional. Fue representante a la Cámara entre 2006 y 2010, perdió la reelección inmediata y regresó al Congreso para el periodo 2014-2018.
Excompañeros en el Congreso coincidieron en que Hurtado nunca fue un orador destacado ni un congresista de protagonismo. Su fortaleza, dijeron, estaba en la disciplina y en el manejo de temas económicos.
Carlos Arturo Piedrahíta, exrepresentante liberal, recordó en su momento que en su primera posesión llegó al Capitolio vestido con sombrero, carriel y atuendo de arriero, una representación que repetiría en otras ocasiones. “Siempre demostraba la antioqueñidad en todos sus actos”, relató.
Otro exparlamentario lo describió como “demasiado discreto”, al punto de no generar contradictores visibles, una característica que reforzó su imagen de operador silencioso.
Tierras, loteos y sospechas en Tarso
En paralelo a su carrera política, en Tarso se afianzó la percepción de un crecimiento sostenido del patrimonio de la familia Hurtado. Según versiones locales, los predios adquiridos por el clan suelen subdividirse y venderse posteriormente con amplios márgenes de ganancia.
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En el municipio es voz populi que en uno de esos loteos habría adquirido tierras el exalcalde de Medellín, Daniel Quintero, en una transacción que no aparece en registros oficiales. Así explicaban algunos habitantes la presencia recurrente de caravanas de vehículos blindados en la zona, que atribuyen a visitas del exmandatario.
Las suspicacias se profundizan porque muchas de estas compras de tierra habrían coincidido con periodos en los que miembros del clan Hurtado ejercían el poder local. Para algunos líderes comunitarios, esa simultaneidad no sería casual: sostienen que pudo incidir en decisiones administrativas que terminaron valorizando los predios, como ajustes al Esquema de Ordenamiento Territorial (EOT) o intervenciones en la red vial.
Una hegemonía política prolongada en Tarso
Este señalamiento se inscribe en una percepción más amplia sobre la prolongada influencia política de la familia en Tarso. Durante décadas, los Hurtado han mantenido una presencia constante en la vida pública local, con seis periodos en la Alcaldía, participación permanente en el Concejo y acceso a cargos clave dentro de la administración municipal.
Esa continuidad en el poder, afirmaron habitantes del municipio, también se refleja en la forma como el clan gestiona sus intereses económicos. No siempre es claro a nombre de quién figura cada propiedad, pues suelen actuar como un bloque familiar, mediante sociedades formales o acuerdos de confianza sustentados en los vínculos de parentesco.
La influencia de los Hurtado, además, no se ha limitado a Tarso. Darío Hurtado, uno de los hermanos, fue alcalde de Jericó antes de la elección popular, y la matriarca de la familia, doña Cesarina, ocupó una curul en el Concejo local hace cerca de cuatro décadas. “Con frecuencia postulan a esposas o sobrinas al Concejo”, relató una fuente del municipio.
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Cuotas burocráticas
A esta dinámica se suma otro elemento sensible: la asignación de cuotas burocráticas. Fuentes locales sostienen que cuando uno de los Hurtado alcanza una posición de influencia, otros miembros del clan logran vincularse a entidades públicas, reforzando la percepción de un entramado familiar con amplio control institucional.
Esta práctica, según esas versiones, habría trascendido incluso el ámbito local. En 2020, el portal periodístico Vorágine denunció que dos sobrinos del grupo trabajaban en Metrosalud y en la Terminal del Sur, además de un allegado que ocupaba un cargo directivo en Corantioquia.
Hurtado, el de mayor proyección en cargos públicos
Dentro del clan, Óscar Hurtado es señalado como el integrante con mayor proyección en cargos públicos. Además de su paso por el Concejo y la Alcaldía locales y por el Congreso, se desempeñó como contador del Fondo Ganadero de Antioquia.
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Aunque muchos tarseños reconocen el énfasis de la familia en la formación académica y el ascenso social, persisten cuestionamientos de fondo. Según esas versiones, el clan habría consolidado un “emprendimiento” al amparo del poder público, mediante cambios normativos y obras viales que coincidieron con terrenos de su propiedad y contribuyeron a su valorización.
Cercanía con Daniel Quintero y polémicas
La relación con Quintero es uno de los capítulos más controvertidos de su trayectoria. Durante la administración de Medellín fue secretario de Hacienda y asumió en varias ocasiones como alcalde encargado, tanto durante la suspensión de Quintero por la Procuraduría como tras su renuncia en octubre de 2023 para dedicarse a la campaña política.
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Fuentes de La Alpujarra aseguraron en ese momento que esa cercanía respondió a una lógica de lealtad política, pues Hurtado fue uno de los defensores más visibles de Quintero en los momentos más críticos de su administración. Otras versiones indican que su vínculo es incluso más estrecho con Diana Osorio, esposa del exalcalde, relación que se habría fortalecido durante su paso por el Congreso.
La controversia por su llegada al ISA Interchile y al sector cafetero
Este año, Óscar Hurtado ha estado en el centro de la controversia por dos nombramientos de alto perfil que generaron fuertes reparos en distintos sectores.
El primero se produjo en marzo, cuando fue designado codirector de Isa Interchile, filial del grupo ISA que se encuentra bajo escrutinio del Gobierno chileno tras el apagón registrado el pasado 25 de febrero.
La decisión levantó suspicacias por dos razones: se dio en medio de la llegada de varios aliados del exalcalde Daniel Quintero a la compañía —presidida por el cuestionado exgerente de EPM, Jorge Andrés Carrillo— y porque el perfil de Hurtado es visto como más político que técnico para una empresa estratégica del sector energético.
El segundo nombramiento lo llevó al sector cafetero. La Superintendencia de Economía Solidaria lo designó como contralor de la Cooperativa de Caficultores de los Andes, una entidad que intenta retomar operaciones en el marco de un plan de viabilización liderado por la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), luego de más de cinco años de intervención.
Este último movimiento cayó como un baldado de agua fría entre los cafeteros, que expresaron su preocupación por un eventual giro político en una organización clave para la economía regional.
Así, la combinación de un estilo reservado, un ascenso político silencioso y un poder acumulado a lo largo del tiempo vuelve a situar a Hurtado en el centro del debate público, ahora desde cargos de control en sectores estratégicos como la energía y el café.
Bloque de preguntas y respuestas
- ¿Quién es Óscar Hurtado?
- Político antioqueño, excongresista y exsecretario de Hacienda de Medellín, con influencia en Tarso y cargos actuales en ISA Interchile y la Cooperativa de Caficultores de los Andes.
- ¿Por qué investigan al clan Hurtado en Tarso?
- Habitantes señalan expansión patrimonial ligada a decisiones administrativas que habrían valorizado tierras adquiridas por la familia durante sus periodos de poder.
- ¿Cuál es su relación con Daniel Quintero?
- Fue uno de sus principales aliados políticos, secretario de Hacienda y alcalde encargado durante su administración en Medellín.
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