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No solo los científicos y los sistemas de salud están trabajando para tratar de controlar los efectos del coronavirus y en el mejor de los casos encontrar una vacuna, sino que ingenieros de cómputo e investigadores de esas aéreas se sumaron a las tareas.
El Laboratorio Nacional de Oak Ridge (ORNL) anunció que están trabajando con Summit,de IBM, el computador más poderoso del mundo, para identificar compuestos farmacológicos que podrían ayudar a combatir a este virus infeccioso, informó el diario argentino Clarín.
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Según la información, la idea es buscar moléculas que eviten que el virus se una a células sanas para infectarlas. Los resultados fueron divulgados en “ChemRxiv” -un sitio de la comunidad científica- para que otros puedan aprovecharlos.
Summit logró identificar 77 compuestos de moléculas pequeñas que pueden ser valiosos para las pruebas experimentales. En las simulaciones, estos compuestos son claves para la entrada del virus en la célula humana y podrían interferir con el proceso de infección, confirmó Clarín.
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A este trabajo se sumaron las multinacionales Intel y Lenovo, que anunciaron que están colaborando con el Instituto de Genómica de Pekín (BGI) para descifrar el genoma del coronavirus.