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Formar, informar, transformar, investigar y entretener. El Grupo EL COLOMBIANO tiene objetivos claros: ser la conexión que permita crear sociedad, transformar realidades, informar a las audiencias y ayudar a las compañías a crecer.
La verdad, la libertad y la independencia siguen siendo las bases, y desde este momento inicia una transformación digital que nace y crecerá en una sociedad resiliente, emprendedora y ávida de nuevos contenidos.
Un comité de expertos acompañará el proceso, seis reconocidos en Hispanoamérica (Simón Borrero, Silvina Moschini, Luis Vives, Juan Camilo Suárez, Luis Castaño y Javier Villamizar), y otros tres miembros de la Junta Directiva, Alba Luz Hoyos, Ricardo Leyva y Alejandro Mesa (ver fotos).
La idea nació a partir de una necesidad global: en la ciudad, en el país y en el mundo las personas están cambiando la forma en que trabajan, se entretienen, compran y consumen. “Esos cambios nos piden que entendamos las dinámicas y nos acomodemos a ellas para generar valor”, explica Juan Camilo Suárez, copresidente colombiano de Isobar Colombia. Añade que a esto se suman necesidades tecnológicas y de privacidad de datos que servirán para respaldar la iniciativa de negocio y las propuestas a las que la empresa se debe enfrentar.
EL COLOMBIANO no es el primero, ni tampoco será el último. Muchos ya han sido exitosos, otros han fracasado en el intento. La propuesta de este Grupo es hacerlo juntos.
Conectar con las audiencias
No se trata de ir corriendo a lo digital. Es un proceso que va más allá, “que usa la tecnología, sí, pero que la humaniza. La idea es conocer al humano, conectar con la sociedad para poder crear contenidos sobre esa base”, explica Luis Castaño, consultor en First Data Party.
Identificar las audiencias es, entonces, la clave. Para esto EL COLOMBIANO estará en distintos espacios de la sociedad, “será los ojos, los oídos, permitirá medir la temperatura de lo que está pasando en la calle, y desde ahí se entiende a la audiencia y será más fácil construir esa transformación de la sociedad”, añade Castaño.
Hoy hay nuevas generaciones y, por lo tanto, nuevas necesidades. Eso hace, dice Suárez, que sea importante cambiar, pensar cómo participar de esas conexiones del futuro.
Parece simple, pero en la práctica es un reto que muchos no sobrepasan. Hay quienes fallan porque entienden mal lo que significa la digitalización. Creen que se trata de copiar y pegar del papel a la computadora. Y no es así.
“Muchas estrategias de otros medios han generado un mellizo digital de la prensa escrita, de la radio, de la televisión, pero no se trata de eso sino de entender a la audiencia. El contenido debe evolucionar y los que entienden esto son los exitosos, con propuestas de valor con alto nivel de segmentación”, puntualiza Javier Villamizar, operating partner de SoftBank Vision Fund.
Crear valor desde tradición
Es un paso a paso. Identificar a las audiencias, entenderlas, trabajar de la mano de los anunciantes y presentar una propuesta de valor segmentada de acuerdo con las microaudiencias y recordando los propósitos de la organización, que son mantener la verdad, construir confianza y país, transformar y conectar sociedad y comunicar. Después, “el tema digital viene por añadidura, como consecuencia del proceso”, finaliza Castaño.
Cuando una empresa entiende quién está entrando a ver el contenido, quién lo consume y de qué forma, podrá ofrecerle productos asertivos, diferenciados, tanto a las audiencias como a los anunciantes. Y eso es lo que se hará.