En el cementerio de Abejorral fue sepultada ayer a las 2:30 p.m., la niña Hilary Alexandra Amariles, de 6 meses, muerta tras la explosión de una polvorería, en el corregimiento Pantanillo, de esa población.
El secretario de Gobierno de Abejorral, Édison Ramírez, informó que el hecho ocurrió a las 5:30 p.m. del pasado lunes, cuando los integrantes de una familia elaboraban juegos pirotécnicos en una de las alcobas de su casa.
Tras la detonación se produjo un incendio que abrasó a las personas que se encontraban en el lugar: Samuel Eliécer Bernal, de 39 años, y dos mujeres adolescentes de 17 y 15 años de edad y a una niña de seis meses.
El adulto y las dos jóvenes quedaron con quemaduras de consideración, que obligaron su traslado al Pabellón de Quemados del Hospital San Vicente Fundación, de Medellín, mientras que las llamas cobraron la vida de la bebé.
El funcionario indicó que la fábrica carecía de permiso y las autoridades no tenían conocimiento que estuviera funcionando allí, en pleno centro del corregimiento Pantanillo.
Advirtió que en Abejorral están prohibidos el uso y fabricación de la pólvora y solo se permite en eventos de pirotecnia, debidamente autorizados.
María Inés Cardona, directora del departamento Administrativo del Sistema de Prevención, Atención y Recuperación de Desastres de Antioquia, Dapard, dijo que esta es la primera tragedia con pólvora que se registra en el departamento en el inicio de la temporada de fin de año.
Sin embargo, en 2015 es la segunda explosión de estas características que se registra en Antioquia. La otra fue el 5 de julio en El Santuario sin víctimas, pero con dos casas destruidas.
Llamó la atención de la ciudadanía para que no almacene ni fabrique pólvora en sus casas en medio de sus niños y de las zonas pobladas, para evitar hechos tan lamentables como el ocurrido el lunes en Abejorral.