El “Plan pistola” que el Clan del Golfo está llevando a cabo en contra de la Policía en el departamento está generando aún más temor entre la población civil ya que, además de que la Fuerza Pública se convirtió en el blanco de sus ataques, la estructura criminal estaría aprovechando el acuartelamiento de los uniformados para ejecutar asesinatos selectivos en medio de otras disputas con otros grupos armados ilegales.
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Esa es la percepción que por lo menos tienen en Segovia y en Remedios, Nordeste del departamento. Solo en la última localidad, los homicidios han aumentado a la par de los ataques en contra de la Policía en los últimos días.
Este fin de semana se reportaron los asesinatos de dos jóvenes, uno de ellos menor de edad, uno en cada municipio. El primer caso, de acuerdo con Caracol Radio, ocurrió este sábado en el barrio Briceño de Segovia, cuando un hombre de 18 años, identificado como Kevin Arturo Pinto Pérez, fue ultimado por hombres armados cuando salía de la institución educativa La Cruzada, donde estaba cursando grado 11. En ese momento se estaban adelantando jornadas deportivas, que tuvieron que ser canceladas por el homicidio.
La segunda muerte violenta ocurrió en el barrio Las Pavas de Remedios, que colinda con Llano de Córdoba, un sector donde se registran cinco asesinatos desde el 20 de abril. En Las Pavas fue hallado el cuerpo de un menor de edad –aún sin identificar– de unos 16 años con varias heridas por arma de fuego. De acuerdo con vecinos, el adolescente llevaba poco tiempo viviendo en el sector tras llegar de la zona rural.
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La comunidad de Remedios, señaló la emisora, aunque es consiente de lo que está ocurriendo con la policía, pide que no la dejen a merced de los criminales que, según los lugareños, están “haciendo y deshaciendo con la juventud en esa población”, por lo que exigen que se refuerce la seguridad.
