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Tras las declaraciones de “Otoniel” ante la JEP, en las que acusó a altos mandos del Ejército de colaborar con grupos paramilitares, el general en retiro Leonardo Alfonso Barrero anunció que emprenderá acciones legales para “limpiar su nombre” de lo que calificó como “mentiras” del excapo para evadir la extradición.
Barrero se defendió de las afirmaciones que lo vinculan con el Bloque Centauros de las Autodefensas Unidas de Colomia –de las que Otoniel fue parte–, y lanzó un contraataque en el que aseguró que demandará al exjefe del Clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga, alegando injuria y calumnia.
En el comunicado, el excomandante de las Fuerzas Militares también dijo que su nombre y honra se han visto envueltos en un “espectáculo mediático” y que no permitiría que Úsuga lo use para “mentirles a los magistrados de la Jurisdicción Especial para la Paz” y retrasar al máximo su proceso de extradición.
Las acusaciones contra Barrero
En las audiencias de “Otoniel” ante la JEP, el exnarcotraficante salpicó a altos mandos de la Fuerza Pública y del Estado como el exdirector del DAS en el departamento de Casanare, Orlando Rivas, y el general (r) Henry Torres Escalante.
Sobre el general (r) Barrero, el exjefe del Clan del Golfo lo acusó de servir como puente entre estructuras dedicadas al narcotráfico y el Ejército, por lo que, según él, era considerado como “parte de la nómina del Bloque Centauros”.
Sobre esto último, Barrero dijo que “jamás he recibido dádivas, ni patrociné a ningún grupo al margen de la Ley, a los que contrariamente combatí en varios escenarios del conflicto. Al respecto, existen pruebas en manos de la Justicia Especial para la Paz, que irrefutablemente respaldan mi inocencia”, dijo en su comunicado.