Julián Rosales, el niño colombiano diagnosticado con cáncer que recibía tratamiento en Florida, Estados Unidos, murió en calma el pasado 14 de marzo rodeado de su mamá, Catalina Azcárate, que lo acompañó el último año de su tratamiento; y de su padre, Andrés Fernando Rosales, que pudo viajar hace un mes gracias a una visa humanitaria que le concedieron.
Después de la ardua lucha por recuperarse y por tener a su papá a su lado, Julián, murió por el sarcoma de Ewing, una extraña enfermedad que no suele ser frecuente en niños y adolescentes.
Explica el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos que el sarcoma de Ewing puede desarrollarse en múltiples partes del cuerpo, como brazos, pelvis, columna, cráneo, cuello, entre los huesos y tejidos blandos. Una vez se disemina, el paciente entra en la etapa terminal de la enfermedad. En esa última fase fue que Andrés Fernando se reencontró con su hijo, a quien no veía desde hace dos años.
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Doce días después de su deceso, Catalina, su mamá, publicó el último deseo de su hijo en el que pidió, como en su película favorita, Coco, no ser olvidado.
“Julián me dijo que lo recordara como en la película de Coco, que hiciera un altar para él con su foto, Dios y la Virgen. Dijo: ‘No me olvides y búscame en el lugar favorito, ahí estaré’”, escribió Catalina en una publicación en la que compartió una foto de Julián celebrando uno de sus cumpleaños.
En la publicación, la mujer también contó cómo tomó el niño su diagnóstico. “A ti no te importó mucho, siempre me decías que todo iba a estar bien, que tuviera fe y así fue hasta tu último día en la tierra”.
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“Recuerdo cuando te miraste al espejo en el baño y me dijiste que ningún niño se merecía tener esa enfermedad, pero pensabas que te tocó a ti porque tú eras muy fuerte y podías soportar tu enfermedad. Pero era más doloroso para ti soportar que otro Niño la tuviera. Recuerdo cuando tu vecino de tres años quería ir detrás de ti a jugar y tú no podías verlo por que te dolió saber que él también tenía cáncer”, contó la mamá en el sentido mensaje.
También reveló un par de sueños que Julián se planteó para sensibilizar a la gente sobre su enfermedad. De hecho, quería convertirse en el niño que lograra encontrar la cura para el Sarcoma de Ewing.
“Recuerdo que tu sueño era ser el niño que saliera en televisión con la cura para el Sarcoma de Ewing y querías tener muchos seguidores como hoy en día los tienes, también me dijiste que querías salir en el programa de la Rosa de Guadalupe, pues mi cielo cumpliste muchos de tus sueño o ideas y a mi me salvaste, estoy orgullosa de ti”, concluyó la mamá en la publicación.
