Andrés Felipe Osorio Osorio y Carlos Mario Montoya Castro son dos mayores retirados de la Policía que cayeron en una redada contra el lavado de activos. Los hombres, al parecer, pertenecían a una red delictiva que se encargaba de “limpiar” los dineros del narcotráfico.
“La labor investigativa de la Fiscalía General de la Nación, en articulación con la DIJIN de la Policía Nacional, permitió identificar a una red delictiva que estaría involucrada en el lavado de 24.970 millones de pesos, que corresponderían a recursos obtenidos por el tráfico trasnacional de estupefacientes”, señaló la Fiscalía en un comunicado.
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Además de los policías, otras nueve personas fueron capturadas durante los operativos que se realizaron en Cartagena (Bolívar), Baranoa (Atlántico) e Ibagué (Tolima).
Los oficiales, dice la investigación, habría creado dos comercializadoras de productos cárnicos con el único fin de darle apariencia de legalidad a los dineros ilícitos.
“Una de las compañías, en tan solo dos años, reportó transacciones bancarias por 11.000 millones de pesos, movilizó 971 millones en efectivo en carros de valores y registró 117 transacciones por 33.000 dólares en el Banco de República”, señaló la Fiscalía.
Los demás capturados tenían vínculo con las empresas y figuraban como los dueños de 7 lotes, 2 casas, 12 apartamentos, 9 carros y objetos lujos sin tener la capacidad real –o al menos estabilidad laboral– que justificara el acceso a los bienes.
Todos los capturados ahora deberán responder por los delitos de concierto para delinquir agravado y lavado de activos. Los oficiales retirados no aceptaron cargos pese a que permanecen en prisión domiciliaria desde 2023 por otro proceso que los vincula a tráfico de drogas.