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En su llegada al poder, este domingo 7 de agosto, el presidente Gustavo Petro dejó claro que el Gobierno Nacional emprenderá medidas urgentes para luchar contra el hambre en el territorio nacional, y aseguró en su primer discurso que hará reformas para tratar de lograr la soberanía alimentaria.
Al respecto, el presidente expuso que buscará que el Estado brinde infraestructura como sistemas de riego y otras medidas como créditos, técnicas de cultivo y semillas mejoradas para que el campesinado pueda potenciar la producción nacional de alimentos.
En su discurso, el presidente insistió además en que Colombia debe reforzar su producción de maíz, tema que ha mencionado desde hace meses dentro de su plan proteccionista en el que está incluida la posibilidad de aumentarle los aranceles a la comida importada.
Con este anuncio, Petro dejó claro que tomará acciones para reforzar la producción de alimentos y para articular ese plan con la lucha contra el hambre está previsto, por parte del Pacto Histórico, radicar en el Congreso un proyecto de “Ley contra el hambre” que está en construcción.
Días atrás, el senador Wilson Arias, del Pacto Histórico, aseguró que se están definiendo detalles de la iniciativa como sus costos y a cuántas personas podría beneficiar, y explicó que se entregará un bono alimentario a las familias vulnerables.
“Tenemos que hacer un bono alimentario explícito y focalizado para ciertos sectores de la población probablemente con una legislación expedida con facultades extraordinarias porque es un tema urgente”, expuso el senador Arias.
Por su parte, el también senador Iván Cepeda agregó que “se buscará subsidiar alimentos básicos como la carne, el arroz, la leche y los huevos. Una ley destinada a millones de compatriotas quienes viven hoy en la pobreza”.
En esa línea, Cepeda planteó que se trataría de un plan articulado para brindar ayuda y, a su vez, reforzar la producción de alimentos. En ese sentido señaló que se tiene pensado crear comedores comunitarios y espacios geográficos en las ciudades para la producción alimentaria.
EL COLOMBIANO conoció que el Gobierno Nacional construyó un borrador sobre un “acuerdo nacional contra el hambre” con el que se busca poner a disposición de la población en condición de vulnerabilidad alimentos al 50 % de su precio comercial.
“Se propone canasta inicial de productos: arroz, harinas precocidas, huevos, aceite vegetal, pastas y panela. Más adelante: leche en polvo, pan tajado y papa, productos de circuitos cortos como plátano, hortalizas frescas, leche fresca y frutas”.
La comida podría subir de precio
Más allá de la iniciativa que busca subsidiar el 50 % de los alimentos a los hogares vulnerables, la medida proteccionista que ha desatado controversia es la de la del aumento a los aranceles para la importación de alimentos como el maíz, asunto que podría repercutir en el aumento de los precios de la comida.
“Hay que elevar aranceles a las importaciones de bienes que se pueden producir en Colombia con alta intensividad de trabajo como ocurre en la rama de producción de alimentos”, expuso Petro durante la contienda presidencial.
Para el investigador económico de la Universidad Sergio Arboleda, Luis Fernando Ramírez, esta medida no sería oportuna en 2022 por las altas tasas de inflación. Además, planteó que si se suben los aranceles, se tendrá que estimular la producción nacional de la mano del sector privado. No obstante, aclaró que es una medida que podría tener más viabilidad a mediano plazo.
“Ponerle altos aranceles a esos productos que ya están escasos en el mercado mundial y con una tasa de cambio tan fuerte, necesariamente se va a traducir en una mayor carestía para la canasta familiar en temas tan sensibles como el trigo”, dijo el analista.