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Las grandes obras de infraestructura, como la construcción de embalses y el incendio forestal en Unguía, Chocó, en marzo de 2016; fueron algunos de los factores que hicieron que la cifra de deforestación aumentara en el último año en un 44 %. El país pasó en 2015 de 124.035 hectáreas deforestadas a 178.597 en 2016. Según el monitoreo del Ideam, cada hora, se pierden 20,6 hectáreas de bosque.
Las causas identificadas fueron la praderización, la ganadería, los cultivos ilícitos, el desarrollo de infraestructura vial, la extracción ilícita de minerales y los incendios forestales.
Para entender las cifras de deforestación en su magnitud, que es como si durante 2016, el municipio de Dabeiba, Antioquia, hubiera sido borrado del mapa.
Estas son algunas de las conclusiones que entregó ayer el Ideam tras presentar el informe anual del monitoreo de la superficie de bosque, en el que advierte que la región de la Amazonia sigue siendo la más afectada. Según el informe, su deforestación alcanza al 39% de la superficie. Le siguen la región Andina con un 26% y el Pacífico con el 16%.
En el caso de la Amazonia, según explicó el director del Ideam, Omar Franco, la mayor afectación se presentó en Putumayo, Caquetá, Meta y Guaviare, principalmente en los municipios de Uribe, Mesetas, San Vicente del Caguán, Cartagena del Chairá, Puerto Guzmán y Puerto Leguízamo.
“Este aumento de deforestación se ve altamente activado en áreas como la carretera marginal de la selva, la cual afecta la conectividad ecológica entre los Bosque de los Andes y la Amazonia Colombiana. Y también la carretera Calamar-Miraflores, que aunque es incipiente, puede constituirse en una nuevo frente de ampliación de la frontera agropecuaria”
El Sistema Nacional de Áreas Protegidas acumuló una deforestación de 10,655 hectáreas para 2016, que representa el 6% del total nacional. Uno de los parques nacionales más afectado es el Catatumbo-Barí.
Los municipios con mayor deforestación en todo el país son San Vicente del Caguán y Cartagena del Chairá en Caquetá. También Riosucio y Unguía en Chocó.
El ministro Luis Gilberto Murillo indicó que el control de la deforestación no es simplemente del sector ambiental, sino un compromiso que debe asumir todo el país. “Esto se tiene que liderar al mas alto nivel. Tenemos que garantizar que hay alternativas económicas para las regiones que viven en las zonas deforestadas, son poblaciones vulnerables, sin alternativas. Sabemos que hay que brindarles alternativas para que cuiden el bosque. Por eso es importante generar incentivos financieros”.
Indico Murillo que por esa razón se creó la Comisión Intersectorial de Control de la Deforestación y el protocolo de control de la deforestación. La cual estará liderada desde Presidencia con el acompañamiento del Ministerio de Ambiente y con la participación de los Ministerios de Defensa, Transporte, Minas y Agricultura y contará con el acompañamiento permanente del Ideam.
“Ya conocemos las causas directas de la deforestación, hemos diseñado una estrategia, como el proyecto de gobernanza forestal, porque no podemos permitir que la ilegalidad nos siga robando nuestros recursos. Estas medidas requieren de desarrollos normativos complementarios que ya están listos para ayudarnos a alcanzar nuestros objetivos”, dijo Murillo.