La primera preocupación de los profesores, justo cuando comenzó la pandemia, era cómo conectar a sus estudiantes, algunos residentes en zonas rurales a varias horas de los cascos urbanos. Luego la pregunta fue cómo mantenerlos motivados en la distancia y, mientras buscaban un plan para eso, a los docentes los sorprendió una deserción silenciosa.
En el campo, cuenta Roger Alexander Acosta, la comunicación con los niños y jóvenes es por Whatsapp y mensajes de texto. Pero la red es limitada o no hay datos. El profesor de la Institución Educativa Rural Carlos González en Belmira, en la que están matriculados aproximadamente 400 alumnos, cuenta que ya comienzan a perderle la pista a algunos estudiantes que antes eran muy “pilos” en las aulas.
Entonces, se pregunta: “¿Qué trabajo le mandó yo a un muchacho que solo tiene el cuaderno y se conecta a Whatsapp pero no puede quedarse mucho tiempo en línea porque debe guardar datos para la próxima clase?”.
Según la Gobernación de Antioquia, el 75 % de los alumnos de Antioquia (308.768) no cuentan con computador en su casa. Y, entre los que sí tienen computador, el 66 % (274.512) no tiene internet en sus hogares.
Alexandra Peláez Botero, secretaria de Educación de Antioquia, explicó que la tasa de deserción es generada con los datos del sistema integrado de matrículas —Simat—.
El indicador, explicó, tiene algunas estimaciones: solo se puede elaborar con un año de rezago. Es decir, la tasa de deserción se puede calcular con respecto al año 2019. Para conocer el dato de 2020 habría que esperar hasta el primer trimestre de 2021.
Sin embargo, a través del Sistema de Información para el Monitoreo, la Prevención y el Análisis de la Deserción Escolar —Simpade— es posible obtener información de potenciales desertores del año en curso y las causas asociadas a ello.
Así, con corte al 30 de junio de 2020, 2.668 estudiantes en Antioquia aparecían en estado retirado (1.191 mujeres y 1.477 hombres; 1.722 en el área rural y 946 en la urbana).
Peláez enfatizó en que, si se toman los 2.668 estudiantes en estado retirado como posibles desertores del sistema, la tasa de deserción de este primer semestre sería de 0,6 %. Comparando con el año 2019, con corte a esta misma fecha, la tasa estaba en 1,8 %
“Esta no es la deserción aún. Habría que esperar si ese retiro se dio debido al traslado de la vivienda entre municipios de Antioquia, dado que las familias han ido agrupándose en donde haya una cabeza de hogar que sea capaz de garantizar el sustento en medio de la pandemia”, dijo.
Aunque no hay una cifra exacta, Peláez manifestó que durante la pandemia también han notado cómo algunas familias que tenían sus hijos matriculados en el sector privado han ido migrando al oficial por la crisis económica.
Osvaldo Torres, presidente en Antioquia de Conaced –Confederación Nacional Católica de Educación–, contó que en la última encuesta que hicieron, hace una semana, identificaron que un 1,4 % de los estudiantes matriculados en sus colegios vinculados (152 en el departamento) se habían retirado.
Todavía están consolidando esa cifra, puesto que no tienen certeza de que todos los que se han retirado han migrado al sector oficial: “Algunos salen, pero se van a otro colegio más barato. Tenemos colegios con pensiones de $1’200.000 y otros de $200.000”.
La deserción, según Torres, ha sido más notoria en el grado preescolar .
Según la alcaldía de la ciudad, debido a la pandemia la permanencia escolar está en riesgo para 8.241 estudiantes. Maestros de instituciones oficiales reportan que no han tenido contacto con 6.542 estudiantes y 1.699 ya reportaron que no desean continuar sus estudios durante el 2020. La secretaría de Educación lanzará la campaña #EstudiarTransformaMiFuturo para buscar a posibles desertores.
Periodista del Área Metro. Me interesa la memoria histórica, los temas culturales y los relatos que sean un punto de encuentro con la ciudad en la que vivo, las personas que la habitan y las historias que reservan.