Cuando se habla del tiempo que necesita un entrenador para transmitir y empezar a implementar una idea táctica en un equipo de fútbol hay varias teorías. Algunos técnicos hablan de 20 días, y otros de uno o dos meses.
La inquietud surge a raíz del escaso margen que tendrán los elencos colombianos para los entrenamientos colectivos antes de la competencia, aprobados por el Gobierno este lunes como parte del protocolo de bioseguridad ante la pandemia del coronavirus.
Junior y América, campeones de los torneos Apertura y Finalización de 2019, disputarán los días 8 y 11 de septiembre, en Barranquilla y Cali, la Superliga colombiana. Es decir, menos de ocho días de prácticas en grupo.
Estos dos mismos elencos, además del DIM, retomarán la Copa Libertadores entre el 16 y 17 del mismo mes, aparte de la Liga Betplay que para los 20 elencos de la primera división se tiene previsto reanudar desde el 19 de septiembre.
Frente a este panorama hay varios aspectos para analizar: ¿qué factores de riesgo enfrentarán los futbolistas?, ¿qué elencos tendrán ventajas?, ¿en qué condiciones llegan los protagonistas del espectáculo?
Y es que durante los casi seis meses de receso de los torneos, la mayoría de elencos sufrió retoques en sus nóminas y otros, como el América, cambiaron de estratega.
El técnico Wilson Gutiérrez, extécnico de Santa Fe, advierte que tras la falta de tiempo de preparación, a los equipos les tocará acudir a la memoria táctica, “sobre todo esos que conservaron la base y llevan un buen período juntos”. Añade que “estos tendrán una ventaja sobre los demás”.
Entre estos aparecen Junior, Cali y Nacional. A propósito de los verdes de Antioquia, que comenzarán como líderes, el volante Andrés Andrade señaló en rueda de prensa que si bien cuentan con atletas de alta calidad, no puede asegurar qué han perdido en tanto tiempo sin competir. “Llevamos dos meses pegándole a un cajón y con trabajos individuales, y eso no es fútbol”.
Añadió que esta es la pretemporada más larga que ha tenido en su carrera y se mostró sorprendido de que hayan tardado tanto en autorizar los entrenamientos. “Estamos ansiosos de que nos dejen interactuar. El temor ha pasado y en las pruebas de covid hemos salido limpios”.