Dedicarse a los nuevos proyectos de liderazgo deportivo, los cuales cumple con una empresa multinacional, no ha sido excusa para que Moisés Fuentes abandone la práctica de la natación.
A sus 43 años este santandareano se mantiene vigente gracias al fuerte entrenamiento en las piscinas, compensando con el sentirse joven e irradiarse de la alegría de sus compañeros de Selección Colombia, 20 años menos que él.
Este deportista en condición de discapacidad –fue víctima de un atraco cuando tenía 17 años y perdió movilidad en sus piernas– quiere aportar esa experiencia y esa actitud al elenco nacional, que desde este sábado arranca el Mundial en Ciudad de México.
“Hemos tenido una preparación muy fuerte, ardua, a conciencia, sobre todo pensando en lograr las medallas doradas que tanto anhelamos”, declara, recién llegado a la capital manita, la cual no visitaba desde 1999.
Moisés, con sus cuatro participaciones en este tipo de citas (bronce en Sudáfrica 2006, cuarto en Holanda 2010, oro en Montreal 2013 y cuarto en Escocia 2015 –todos en 100 metros pecho–), comanda un grupo de cuatro nadadores colombianos, quienes, a pesar de su corta edad, tienen bagaje y títulos: Carlos Daniel Serrano, Nelson Crispín (medallistas paralímpicos) y Óscar Osorio.
“Tenemos una selección de pelaos muy tesos, los cuales han ganado muchas cosas y se preparan fuerte para ganar, por eso estoy confiado en que conseguiremos varias medallas. Yo con ellos trato de tener una relación de hermandad, afecto, siento y me contagio de esa energía, y aprendo muchas cosas de ellos. Claro que mi experiencia me permite hacer las veces de padres para ellos, aunque ya son muy maduros”, expresa Moisés, quien también fue medallista de bronce en las pasadas justas paralímpicas de Río de Janeiro.