El debate sobre el impacto de la inteligencia artificial (IA) en el empleo ya no es una hipótesis o suposición, sino que llegó a la agenda laboral de América Latina con cifras concretas, pues un estudio de WeWork y Michael Page advirtió que entre un 26 % y un 38 % de los trabajos en la región están expuestos a esta tecnología, y hasta un 5 % podría ser completamente automatizado.
En Colombia, la percepción es ambivalente. Por un lado, la IA se ve como un recurso que ayuda a aumentar la productividad, reducir costos y liberar tiempo para tareas estratégicas. Por otro, persisten preocupaciones sobre la pérdida de empleos, los sesgos en algoritmos y el manejo de datos personales.
“La inteligencia artificial ya no es una promesa futura, sino una realidad que transforma los modelos de trabajo. El talento en Colombia la reconoce como un aliado para potenciar la productividad y el balance de vida, pero también plantea la necesidad de avanzar con marcos éticos y de capacitación que garanticen que esta tecnología complemente, y no reemplace, el valor humano”, explicó Nicolás Sánchez, Head of Sales de WeWork para Perú y Colombia.
Le puede interesar: El 94 % de los empleados permanece más tiempo en una empresa que invierte en su desarrollo