Desde el Génesis hasta nuestros días. Creadora de espacios, ambientes y sensaciones. Así es la luz, un elemento fundamental en la decoración del hogar.
Hoy ya no se trata de que ésta sea proporcionada por un simple bombillo. No. La tendencia es que cada estancia de la vivienda tenga distintos tipos de luces, cada una con circuitos independientes, que permitan crear escenas y efectos especiales.
Para Ana Catalina Vallejo, de Pavezgo, empresa especializada en lámparas decorativas, la idea con la iluminación del hogar es lograr espacios armónicos acordes al tipo de decoración que se tiene en la casa.
"Con la luz se pueden resaltar cuadros, esculturas, hacer que un espacio sea más cálido, propicio para el estudio o para recibir una visita, es decir, lo importante es tener claro el objetivo que se quiera lograr para conseguir armonía", comenta.
Por su parte, Alejandra Reyes, arquitecta de High Lights, agrega que ahora la gente piensa en planificar la iluminación desde que arranca a construir su vivienda.
"Los beneficios de esta decisión son, primero, es más económico ya que luego no se tienen que romper cielos, ni canchar paredes y se dejan todas las salidas de energía listas; segundo, en cuanto a lo decorativo, permite prever la iluminación de nichos, obras de arte, es decir, hay más posibilidades", afirma.
Además de manejar las luces a través de circuitos independientes, ahora también se utilizan "dimerizadores" o atenuadores de luz, que permiten controlar su intensidad.
"En las residencias se maneja el control lumínico por varios aspectos: elegancia, confort, ahorro de energía y el aporte al medio ambiente, ya que se minimizan los elementos contaminantes", comenta Carolina Márquez, ingeniera electrónica de High Lights.
A cada espacio su luz
Alejandra Reyes explica que a nivel general lo que se usa en iluminación es la luz halógena en sus distintas presentaciones: ojos de buey en el cielo en dry wall, spots, lámparas decorativas o punticos de luz, como una lluvia de halógenos.
Para el comedor, la arquitecta recomienda descolgar lámparas decorativas sobre la mesa.
Ana Catalina Vallejo sugiere que si el comedor es redondo use una lámpara de igual forma y si es rectangular, lo ideal son lámparas en línea.
En las habitaciones la idea es similar: una luz general y descolgar lámparas sobre los nocheros, sobre todo por la comodidad de no tener la mesa de noche ocupada.
Si se trata de la alcoba de los más pequeños, Ana Catalina dice que la tendencia son lámparas con formas de bicicletas, aviones, helicópteros y barcos. También son válidos los apliques en figuras infantiles.
Por su parte, para la cocina, el vestier y el lugar de estudio, la iluminación es diferente, según cuenta Alejandra Reyes.
En estos espacios se utiliza una luz fluorescente, más blanca y general. Es ideal en lugares de trabajo, como en la cocina o el vestier, que son más encerrados y donde se requiere una luz más plana que no cree sombras.
"Una característica para destacar de la luz fluorescente es que tiene muy buena reproducción de color, entonces en un vestier si saca, por ejemplo, un par de medias no se confundirá con los tonos", explica Reyes.
Más detalles
Otro aspecto fundamental en la iluminación es saber qué tipo de cubiertas tiene la propiedad. Cuando el cielo es en dray wall, lo usual es empotrar todo para tener cielos muy limpios y usar ojos de buey.
Pero cuando hay loza o techos en madera, que no hay forma de empotrar, existen otros sistemas de sobreponer como las guayas, los rieles o los apliques, que permiten, con una sola salida eléctrica, alimentar todo un sistema.
De esta forma, la luz ofrece muchas posibilidades al momento de decorar. La invitación es a jugar, explorar y crear ambientes bien iluminados.
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