Presuntos insurgentes islamistas atacaron este viernes dos mezquitas abarrotadas con centenares de feligreses que asistían a plegarias en el este de Pakistán, en las que retuvieron rehenes y se enfrentaron a la policía, dijeron las autoridades y testigos oculares. Murieron 80 personas y decenas más resultaron heridas.
Los ataques fueron perpetrados al menos por siete hombres, entre ellos tres suicidas, dijeron las autoridades. Dos de los atacantes fueron capturados.
Los ataques de Lahore contra la comunidad Ahmadi ilustran los peligros que corren en Pakistán las minorías religiosas.
Los integrantes de la secta Ahmadi son considerados herejes por muchos musulmanes por creer que su fundador fue el salvador anunciado por el Corán. El grupo ha sufrido durante años discriminación sancionada por el gobierno y ataques ocasionales de islamistas sunis, pero nunca antes tan amplios y coordinados.
Los ataques del viernes tuvieron lugar en los barrios Aldea Modelo y Garhi Shuha, ambos en Lahore, la segunda ciudad de Pakistán, de gran importancia política y militar.
El ataque de Aldea Modelo fue breve, con participación de cuatro asaltantes, que rociaron con balas a los feligreses antes de arrojar granadas de mano , dijo el vicecomisionado de Lahore, Sajjad Bhutta.
A varios kilómetros de distancia, en Garhi Shahu, el enfrentamiento duró varias horas.
Las tomas de televisión mostraron a uno de los atacantes encaramado en un minarete, mientras disparaba con su fusil automático y arrojaba granadas de mano. La policía intercambió disparos con los atacantes, según pudo atestiguar un reportero de Associated Press.
Bhutta dijo que por lo menos tres atacantes mantuvieron rehenes a varias personas. Los tres portaban chalecos con municiones.
"Combatieron con la policía durante algún tiempo, pero al darse cuenta de que estaban vencidos, detonaron sus cargas", agregó.
Por lo menos 80 personas murieron en ambos ataques, además de resultar heridas más de 90, dijo Bhutta. No fueron precisadas las bajas de cada ataque.
Fueron detenidos dos atacantes, y uno fue atendido de diversas heridas, dijo el jefe de la policía de ña provincia de Punjab, Tariq Saleem Dogar.