En los últimos años viene creciendo la demanda de cámaras que se pueden ocultar, según los proveedores de dispositivos de seguridad.
El fenómeno obedece, con base en lo que señalan las fuentes de esta industria, a que las parejas jóvenes cuyos dos integrantes trabajan, se angustian con la posibilidad de que sus pequeños queden en manos de un empleado durante todo el día, a merced de cualquier maltrato físico o psicológico, cuando la persona no es de confianza.
Al presentarse tal interrogante, los padres tienen varias opciones. La primera es acondicionar su videograbadora convencional bajo alguna sábana y programarla para ciertas horas. Una alternativa poco confiable y que suena complicada.
La segunda, tiene que ver con la demanda mencionada, es integrar esas cámaras a los dispositivos de seguridad y al concepto de casa inteligente.
Un sistema de seguridad puede componerse, según el gusto y las necesidades del usuario, de cámaras disuasivas y cámaras ocultas, siendo las disuasivas las que intimidan al potencial ladrón, ya que saltan a la vista, por lo general en las esquinas de los salones o habitaciones.
El efecto que causan en la mente del maleante es que se siente vigilado y se llena de incertidumbre al no saber qué hay al otro lado de la cámara.
Las ocultas, por su parte, si bien son útiles para detectar movimientos extraños en la casa y alertar a las autoridades, se usan a menudo para ejercer control.
Se camuflan casi en cualquier parte e incluso se integran a los sensores de movimiento que hacen parte de la estructura de seguridad del hogar.
A través de cámaras ocultas se resgistran entonces posibles maltratos a los menores y otras conductas reprochables. Es así como la seguridad actual aprovecha la tecnología e integra dos propósitos en uno.
Las vacaciones
Aunque gracias a la tecnología todos los sistemas de seguridad reducen por sí mismos la posibilidad de un robo o una pérdida, son las medidas de prevención personal las que complementan una buena seguridad.
En medio de esta época de vacaciones, las recomendaciones para complementar los sistemas de seguridad son puntuales y para ello consultamos a Metroalarmas:
Según la compañía, la idea es que solo las personas autorizadas utilicen los sistemas de seguridad y que se defina muy bien quién va a tener acceso a las claves. Alguien de entera confianza, aparte del propietario, de ser necesario un segundo operador.
Cuando no son sistemas de activación remota, siempre compruebe que las puertas y ventanas queden cerradas antes de conectar su sistema de seguridad. Así previene falsas alarmas.
Mantenga espacio libre alrededor de los mecanismos de detección. Ponga cuidado en que los elementos decorativos, ropas u objetos de otro tipo no interfieran en el área de protección. Una vez conectado el sistema de seguridad, evite las fuentes de calor en el lugar.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6