Como si fuera poco, a los líos que hoy enfrentan los comercializadores de vehículos con la implementación del Registro Único Nacional de Tránsito (Runt) se le debe sumar que a partir de marzo del próximo año no podrían contar con matrícula inicial para carros importados modelo 2009 a menos que los matriculen como propios y luego, mediante un proceso de traspaso, sí lo puedan entregar al cliente final cuando se concrete un negocio. De lo contrario, lo tendrían que reexportar fuentes de origen.
Así está estipulado en la ley 1281 que entraría en vigencia el próximo primero de enero y que solo permitiría la venta de vehículos importados durante la vigencia del año modelo declarado por el fabricante y dos meses después.
En otras palabras un carro modelo 2009 importado, solo podrá venderse en el país hasta el 28 de febrero. Y así continuaría operando la legislación para los años siguientes.
En su artículo segundo la norma señala que "solamente se podrá hacer registro inicial de vehículos nuevos, entendiéndose por éste los comercializados durante el año modelo asignado por el fabricante y los dos meses primeros del año siguiente. No se podrá hacer el registro de saldos de vehículos, excepto si son de fabricación nacional y sin importación".
Inequidad
Para el presidente de Asopartes, Tulio Zuloaga, esta es una situación totalmente inequitativa porque permite que mientras los vehículos ensamblados sí puedan comercializarse y darles matrícula inicial durante todo el año, sin importar su modelo, los importados tienen una limitación en el tiempo para su venta, cuando la realidad muestra que siempre los comercializadores pasan de un año a otro con saldos que pueden durar uno, dos y hasta seis meses en algunos casos. Incluso, como lo señalaron voceros de algunas marcas, en casos excepcionales todavía cuentan con modelos que superan más de un año.
Además, las marcas, en una tendencia mundial que responde a estrategias comerciales y de mercadeo, también adelantan la presentación y venta de los modelos y es así como desde mediados del año anterior muchos ya tienen en vitrina los carros para el año siguiente.
Proyecto de ley
Por eso, explicó el directivo gremial, con el apoyo de las firmas importadoras, están preparando la redacción de un proyecto de ley que esperan poder impulsar entre los congresistas para eliminar una norma que, señala, causaría grandes perjuicios económicos a las firmas importadoras y a los distribuidores de los vehículos.
Aunque las firmas importadoras y los concesionarios de vehículos no han hecho cuentas del costo que una medida de este tipo podría tener, sí anticipan una fuerte contracción en las ventas y un perjuicio en la rentabilidad de la operación porque el único camino que quedaría para colocar después de febrero esos carros en el mercado colombiano es si el importador o el concesionario los matricula a su nombre y una vez los venda hace el traspaso respectivo al cliente cuando se presente un negocio, un día, una semana o varios meses después.
Por eso antes de finalizar el mes de noviembre, los empresarios del sector esperan poder tener el texto del proyecto de ley listo para llevarlo a la consideración de congresistas que puedan impulsar una nueva norma que derogue esta iniciativa.
El objetivo es poder contar con una nueva norma antes de finalizar el año. Sin embargo, y como el tiempo ya apremia, también exploran una prórroga del Ministerio de Transporte para la entrada en vigencia de la norma y poder así contar con el tiempo suficiente que evite la parálisis en las ventas a principios del próximo año.
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