El técnico de la selección italiana Cesare Prandelli salió este lunes al cruce de las críticas que recibe por la convocatoria del temperamental Mario Balotelli, que hace poco insultó a un árbitro, diciendo que el jugador ya había cumplido su suspensión de tres partidos y no había razón para no llamarlo.
"Si todavía estuviese suspendido, no estaría aquí. Punto. No hay nada que discutir", declaró Prandelli en una conferencia de prensa en el sitio de concentración de Italia. "Jamás convoqué a un jugador suspendido".
Balotelli cumplió el pasado domingo una suspensión por tres partidos por insultar e intimidar al árbitro.
Italia ya está clasificada para la Copa Mundial del 2014 en Brasil, pero todavía tiene dos partidos pendientes con Dinamarca y Armenia.
Prandelli dijo que le molestó mucho lo que hizo Balotelli, pero agregó que "hay que ayudar a este chico a que se calme, porque es uno de los mejores jugadores que tenemos".
"Decidí llamarlo porque esta es la forma en que arreglamos estas cosas, nos miramos a los ojos en el vestuario, hablamos y acordamos que no volverá a suceder", manifestó el técnico. "Tenemos seis o siete meses para demostrar que somos un equipo maduro, que puede sobrellevar la presión de una Copa Mundial".
Prandelli no convocó a Balotelli para un amistoso con Estados Unidos el año pasado, cuando el delantero estaba suspendido por cuatro fechas por agredir a un rival cuando jugaba con el Manchester City.
Los problemas disciplinarios y las frecuentes expulsiones de Balotelli hacen que algunos digan que representa un riesgo demasiado grande para la selección.
"Estoy cansado de estas cruzadas contra Balotelli", afirmó Prandelli. "Cuando todos están en contra de alguien, me gusta defender a esa persona".
Prandelli, por otro lado, elogió el actual nivel del capitán de Roma Francesco Totti, de 37 años.
"Si la Copa Mundial fuese en 20 días, no lo dudaría un momento. Totti vendría", comentó.
Totti se retiró de la selección tras ayudarla a ganar el mundial del 2006, pero se especula que podría ser convocado nuevamente a la luz de sus últimos desempeños con Roma, que ha ganado sus primeros siete partidos de la Serie A italiana.
