En 15 días la constructora CDO deberá desmontar las partes de la fase cinco de Space que quedaron ayer fijadas a la estructura tras la implosión.
¿Partes luego de la demolición? Sí, y entre ellas, enormes losas, una de las primeras causas del sentimiento de desazón que ambientó esta zona de El Poblado después del esperado procedimiento.
En las críticas que se escucharon también estuvo el anticipo de la operación, programada para las 9:00 a.m., según lo anunció Rogelio Gómez, gerente de Atila - firma contratada por CDO para la demolición-, pero que ocurrió a las 8:52.
Decenas de curiosos se apostaban en los alrededores para ver el acontecimiento, cuando, faltando ocho minutos para la hora prevista... ¡Buuuumm… Sonó el bombazo y con él se levantó la nube de polvo blanco.
Nadie en el entorno oyó los famosos tres tonos de la alarma que, según la Alcaldía de Medellín, sonarían antes de la demolición: tres, cinco minutos antes; dos, faltando un minuto, y uno inmediatamente antes de la implosión.
Pasó un rato y apareció la claridad. Y la desilusión en los observadores porque, junto a la fase cuatro, quedó una seguidilla de losas y varillas que, en el murmullo y a más de 200 metros de distancia, generó el comentario de que media fase había quedado en pie.
No obstante, las críticas del entorno contrastaron con los aplausos de las autoridades, que coincidieron en que la demolición fue exitosa y salió tal como estaba planeada.
El alcalde, Aníbal Gaviria, afirmó que los protocolos de seguridad se cumplieron a cabalidad y se logró la protección integral de la gente que participó en la operación y la del entorno. Al explicar por qué quedaron suspendidos fragmentos de la etapa cinco, dijo que no hubo corte entre las fases cuatro y cinco por recomendación de la Universidad de los Andes y por proteger las vidas de los implicados en la demolición, pues era muy alto el riesgo de la cinco.
Por su parte, el ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, sostuvo que en 15 días CDO desmontará los restos de la cinco y señaló que esto estaba previsto, por seguridad.
Carlos Iván Márquez, director nacional de Gestión del Riesgo, comentó que la operación fue exitosa. "Es de las más dispendiosas y riesgosas que ha habido en colapso de estructuras en el país. La cinco estaba sujeta a otras cuatro; de ahí la complejidad". Al mediodía señaló que no tenía reporte de incidentes o accidentes por la operación.
Carlos Alberto Gil, director del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres (Dagrd), sostuvo que él había explicado que el momento de la implosión dependía de las condiciones climáticas y resaltó que la llovizna que cayó antes de las 9:00 a.m. fue óptima para el procedimiento.
Apuntó que a las 8:45 a.m. cerraron un tramo de Las Palmas, como se había anunciado, y que las sirenas sonaron las tres veces en los términos estimados, pero eran para quienes estaban más cerca de la operación, detalle del que no se había hablado, pues se entendía que la alarma era para alertar a la comunidad.
Resaltó que no fue tanto el polvero y los bomberos lo ayudaron a disipar rociando agua. Anotó que no hubo afectados por estas partículas ni entre los vecinos ni entre trabajadores de la implosión. Además, que el ruido fue de 108 decibeles, cuando el esperado era de 120.
Reportó que se pavimentará la calle y, máximo en 15 días, volverán los habitantes de la urbanización Olivares, vecina de Space.
Sobre lo ambiental, Carlos Mario Montoya, director del Área Metropolitana, afirmó que el ruido no afectó, el polvo fue disipado rápidamente y las aves retornaron en menos de media hora.
Entretanto, Rogelio Gómez, gerente de Atila, dijo que la operación fue perfecta, sin daños en la infraestructura del sector, y que el polvo se mimetizó en siete minutos, como estaba calculado. Añadió que previeron que quedaran suspendidas partes de la fase cinco.
Fredy Castañeda, quien representó a CDO en la jornada, consideró que todo funcionó como se estimó. "Los elementos de la fase cinco los desmontaremos manualmente, porque ya no hay tanto riesgo. Las fases de la uno a la cuatro no tuvieron afectaciones". Sobre la idea de repotenciar estas etapas, dijo: "Si los edificios no se pudieran repotenciar, tendríamos que acabar con todas las estructuras de aquí hacia el inicio de la cultura de la humanidad. Uno de los objetivos de la ingeniería es salvar edificios; nunca, tumbarlos".
Luis Eduardo Yamín, coordinador de la investigación que adelanta la Universidad de los Andes sobre las causas de la tragedia de Space (que se entregará en marzo), en la que murieron 12 personas, expresó que el equipo académico sugirió no intervenir elementos que unían las etapas cuatro y cinco y que el acero de refuerzo no fue cortado para garantizar la seguridad del personal que tenía que entrar.
"El riesgo se ha disminuido. Las etapas uno, dos, tres y cuatro están en buen estado, aceptable; sigue hacerles una evaluación final. El riesgo de los elementos suspendidos es manejable con expertos y grúas".
El alcalde enfatizó en que "seguimos con la recomendación de Uniandes de demoler de la uno a la cuatro, pero deben cumplirse términos jurídicos del recurso de reposición de CDO (que presentará un plan para repotenciar esas fases). Queremos que el sector se normalice a mitad de marzo".
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