El sábado 7 de junio a las once de la noche un grupo de delincuentes disparó contra una camioneta y mató a Héctor Alejandro Azuaje, un niño de 12 años, quien recibió un tiro en la cabeza.
El hecho ocurrió en la zona de La Vega, al suroeste de Caracas, en el mismo sitio donde una semana después fue violada y asesinada otra menor de edad. El martes pasado, los vecinos del sector decidieron cerrar las vías para llamar la atención ante la indiferencia de las autoridades.
María Lourdes Landaeta, madre del niño asesinado pide que se haga justicia, a pesar de las constantes amenazas que recibe. Dice que no se callará porque "el dolor de madre es muy fuerte y yo no quiero que otra persona lo sufra".
Las investigaciones indican que los asesinos de su hijo eran de la banda "Los Menores", grupo armado que creía que en el vehículo se encontraba la pareja de uno de los jefes de un bando enemigo. No era así y la víctima fue de nuevo un inocente.
Unos dicen que no pasa nada
El ministro del Interior, Ramón Rodríguez Chacín, dice que la guerra de bandas no afecta la seguridad.
Rodríguez Chacín insistió en que el 70 por ciento de los homicidios son el resultado de enfrentamientos entre rivales, porcentaje que, en su opinión, no debería tenerse en cuenta al momento de hacer los cálculos del número de víctimas que deja la inseguridad en Venezuela. Por esta afirmación al Ministro le llovieron críticas de todas partes.
Según datos oficiales del Ministerio del Interior, el promedio de asesinatos cada semana durante 2008 en todo el país (incluidos los que él no quiere calcular) es de 156.
Las estadísticas que manejan los medios hablan de cifras superiores a 40 muertos cada fin de semana sólo en Caracas, número que el Ministro considera como una estrategia política opositora.
Algunos casos ocurridos en Caracas juegan en contra de la teoría del ministro Rodríguez Chacín, pues para los venezolanos ninguna explicación logra sacar de la mente que el problema de inseguridad es el más grande que tiene el país.
El diario El Nacional señala que la mayor causa de muerte entre varones de 15 a 24 años es el homicidio y el Observatorio Venezolano de Violencia indica que por cada 100.000 habitantes hay 45 homicidios, mientras que hace diez años eran 19.
Todos en peligro
Es de tal magnitud el problema de inseguridad, que por primera vez el presidente Hugo Chávez se atrevió a reconocerlo. En su último programa de Aló Presidente propuso la participación de las Fuerzas Militares y la Policía de manera directa para enfrentar el problema.
Pero esta solución también recibió comentarios negativos. El director del periódico Tal Cual, Teodoro Petkoff, señaló que "es obvio que el Gobierno se encuentra impotente y sin ideas frente al grave drama de la inseguridad? El tema jamás ha estado entre las prioridades de Chávez".
Entre las causas de que la inseguridad se haya disparado están el que los policías no cumplen su labor, los tribunales no condenan y las cárceles se encuentran en una situación muy delicada, y son ellas, según Petkoff, la primera línea de las políticas de prevención y represión del delito.
Y aunque el discurso oficial se mantiene en el sentido de que la violencia y la inseguridad se están combatiendo, la gran mayoría de los venezolanos sin importar si son aliados u opositores y que además las padecen, no lo consideran así. Por eso se preguntan ¿cómo se resolverá nuestro principal problema si para el Gobierno este no existe?
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