Por lo menos siete municipios del departamento enfrentan hoy una crisis política de cuenta de las intenciones que existen de revocar a sus respectivos alcaldes.
Datos de la Registraduría Nacional del Estado Civil indican que los municipios en los que ya los ciudadanos radicaron firmas para la iniciativa son Vigía del Fuerte, Sonsón, Murindó y Turbo. Además en San Pedro de los Milagros, Copacabana y Rionegro una parte de la comunidad ya inició la recolección.
El caso que va más adelante es el de Vigía del Fuerte. Allí la Registraduría ya certificó 715 firmas de las 1.119 que radicaron y en dos meses convocará a comicios para que la gente diga si quiere o no que el alcalde Manuel Humberto Moreno, del Partido Liberal, permanezca en su cargo.
En ese municipio la revocatoria es liderada por dos ex aspirantes a la Alcaldía, quienes consideran que al mandatario actual "le quedó grande la administración municipal y se ha dedicado a pegar ladrillos y a gastar los pocos recursos que tiene el municipio en construir una alcaldía", dijo Félix Neftelio Santos, uno de los promotores.
Por su parte, el Alcalde siempre se ha mostrado confiado y más todavía porque cuenta con el respaldo de los 9 concejales de su municipio quienes la semana pasada firmaron una carta en respaldo a su gestión.
"Estoy tranquilo vamos a ir a las urnas y allí se va a ratificar el respaldo que siempre me ha dado el pueblo", dijo Moreno.
En Sonsón, los promotores de la revocatoria radicaron 3.558 firmas pero la Registraduría aún no ha terminado de verificar si cumplen con los requisitos para convocar a las urnas. Para realizar la jornada electoral se necesita que las firmas lleguen por lo menos al 40 por ciento de los votos obtenidos por el mandatario. Luego para que sea efectiva la revocatoria se requiere la aprobación de la mitad más uno de los votos depositados en la jornada, siempre que el número de sufragios no sea inferior al 55 por ciento de la votación válida registrada el día de las elecciones.
Según el alcalde de Sonsón, Jesús Antonio Giraldo, la iniciativa en su municipio es liderada por un pequeño grupo de personas que lo acompañaron en la campaña y que hoy están agrupadas en una veeduría para vigilar su gestión. "El problema es que ellos tenían unas pretensiones muy distintas porque la gente cree que la Alcaldía tiene que ser el gran generador de empleo y lo tiene que ser pero de manera indirecta, con proyectos y programas", explicó Giraldo.
El mandatario cree que la revocatoria también es liderada por algunas personas que hoy están resentidas debido a la terminación de unos contratos de trabajadores oficiales. "Eran un desangre para el Municipio porque significaban 400 millones de pesos al año. Eso genera resentimiento y que empiecen a hacer oposición", advirtió.
Este martes se espera que la Registraduría emita el concepto sobre las firmas radicadas en Sonsón y con la certificación se convoque a las urnas a mas tardar en dos meses.
Los que empezaron
En San Pedro de los Milagros, el alcalde Jaime de Jesús Echeverri también se enfrenta a la crítica constante por parte de algunos habitantes y de la mayoría de los concejales que le hacen oposición.
El lío se desató porque el Alcalde pretende cobrarle impuestos a Colanta, la empresa que mayor empleo genera en el municipio y que ha estado eximida de cumplir con estas obligaciones. El objetivo de Echeverri es que la empresa pague, al menos, lo que le corresponden durante su período de gobierno lo que equivaldría a 10 mil millones de pesos.
El mandatario adelanta una recolección de firmas para una consulta popular en la que le preguntará a la gente si está de acuerdo o no con que las empresas asentadas en el municipio paguen los impuestos y paralelamente se recogen las firmas para la revocatoria de su mandato.
"Me han pedido que pare esa recolección y que ellos paran la revocatoria y así es muy difícil. Ponen a la gente en mi contra diciéndoles que el Alcalde va a acabar con la empresa y eso no es así", explicó el Alcalde.
Hasta ahora, en la Registraduría no se han radicado las firmas para esta iniciativa, ni para la de Copacabana y Rionegro.
Para el presidente de la Federación Colombiana de Municipios, Gabriel Jaime Cadavid, la revocatoria es un instrumento válido para que la ciudadanía acuda a él cuando sea necesario. Sin embargo, considera que "es utilizado casi siempre por la oposición para entorpecer la gestión de los alcaldes y abonarse terreno en futuras elecciones, porque así no lo tumben ya le generan un manto de duda", manifestó Cadavid, que es alcalde de Itagüí.
Lo cierto es que desde que en el país se creó esta figura a través de la ley 134 de 1994, ningún alcalde ha sido revocado.
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