La relación que hay entre un consumidor y un anunciante es como un matrimonio en el que el primero siempre tiene a mano los papeles de divorcio.
Cuando falta honestidad, constancia y transparencia en el diálogo, el consumidor extiende la mano y solicita la disolución. No le cuesta nada, no hay traumatismos.
Así analiza el mercadólogo Sergio Zuluaga la relación que impera hoy en día entre la gente y los medios que consume. Este catedrático del tema asegura que esta época requiere de mensajes puntuales, transparentes y de corta duración.
Sobre este y otros temas iniciaron su debate más de 1.200 profesionales en Cartagena, durante el Congreso Nacional de Publicidad. Esa es la cita que se fijan cada dos años, desde hace 30. Sin duda, el encuentro más importante de esta industria.
La pregunta fundamental que se harán estos expertos durante tres días será ¿cómo hemos cambiado?. Por supuesto, busca identificar todo aquello que hoy dibuja la personalidad del consumidor colombiano y su relación con el entorno.
Qué quiere, qué lo divierte, que lo conecta, que le molesta, cómo se inspira. Y en el mismo sentido, cómo le hacen frente los medios a este desafío.
Cada vez están más cerca los componentes de esta unidad. Lo explica Ximena Tapias, directora de la Unión Colombiana de Empresas Publicitarias, (Ucep).
"Sabemos que los principios se han transformado, así como los consumidores. Él o ella también producen y las fronteras dejaron de existir. Los consumidores producen contenidos y ya tienen la posibilidad de subir a la red todo lo que piensan. Esa es otra forma de hacer publicidad".
En Colombia, la clave radica en la valoración que se haga de la identidad nacional. Ximena Tapias, dice que, en ese sentido, los publicistas colombianos se han ganado un lugar de reconocimiento en América Latina.
Zuluaga considera que sobre los consumidores "no hay últimas palabras". Es claro que la relación es cada vez más estrecha. "El anunciante o los medios tienen herramientas más directas para relacionarse con el consumidor. Lo vivimos con internet, y ahora, será mucho más trascendental con la llegada de la televisión digital".
Marcal Moliné, consultor internacional y creador de MMLB, una de las agencias publicitarias más emblemáticas de España, explicó que la relación es ahora tan intensa que el consumidor se enamora de un producto, incluso antes de conocerlo.
"Ese fue el fenómeno que generó, por ejemplo, Apple. La gente estaba haciendo fila desde el día anterior al lanzamiento del iphone para comprar un producto que no conocía y que no sabía cómo iba funcionar".
El océano de opciones está ahí para que los consumidores se hagan más y más exigentes.
El cliente es global, demandante y dinámico. En tiempos de crisis, como éstos, los anunciantes se enfrentan a un reto de inmensas proporciones. Y hay que aceptarlo.
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