La extorsión, que es otra manifestación del terrorismo que adelantan los grupos armados ilegales y la delincuencia organizada, cobró la vida de dos personas inocentes, en el norte de Bogotá, donde explotó una bomba con entre 5 y 10 kilos de pentonita, en la noche del martes pasado.
En los hechos murieron Carlos Eduardo Romero y Diana Margarita Mora. Nos solidarizamos con sus familias y reiteramos el llamado del Gobierno a colaborar con las autoridades en la entrega de información veraz y oportuna, que evite actos de terrorismo y contribuya a la captura de los que los ejecutan.
El factor sorpresa que hace letal el terrorismo se combate con la unión de la ciudadanía y es hora de actuar unidos, antes de que la tragedia nos toque a nosotros mismos.
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