Las autoridades del Gobierno venezolano informaron que las estaciones de servicios ubicadas en la frontera con Colombia ya se encuentran preparadas para vender, desde este lunes, gasolina en moneda internacional.
El anunció lo hizo el presidente del país, Nicolás Maduro, quien informó que este plan piloto se desarrollará en las localidades fronterizas de Paraguachón, estado Zulia, y Ureña, en Táchira.
Manifestó que los usuarios podrán adquirir el combustible en pesos colombianos, con el fin de frenar las prácticas de contrabando y especulación.
De esta manera, Maduro dio cumplimiento a lo que dijo el 29 de diciembre, cuando dio a conocer esta decisión.
“Vamos a vender gasolina para golpear a las mafias y además para avanzar hacia una frontera sana, de intercambio comercial sano, de intercambio productivo sano, de nuevas actividades comerciales que sustituyen a las mafias en todos los sentidos”, señaló en esa oportunidad.
El director de política del estado Táchira, Luis Díaz también se refirió al tema en su cuenta de Twitter: “Petróleos de Venezuela (PDVSA) está lista para la venta de combustible en moneda extranjera dentro del territorio nacional en Ureña y Paraguachón”.
Mientras que el gobernador del estado Zulia, Francisco Arias Cárdenas, publicó un mensaje en la misma red social en el que asegura que se encuentra en Paraguachón “cumpliendo instrucciones del presidente @NicolasMaduro” y “autorizando con PDVSA la venta de gasolina en moneda internacional”.
De acuerdo con lo detallado por Díaz, en Táchira se habilitaron dos estaciones de servicio para el expendio de gasolina de 91 octanos y Diésel respectivamente.
En otro mensaje agregó que las estaciones de servicio en Ureña están “100 % operativas”.
Según Díaz, el litro de gasolina será vendido en 1.200 pesos colombianos (unos 0,39 dólares) y este precio será cobrado “no solamente a los vehículos con placa colombiana y que residen en Colombia”, sino también a aquellos que tengan placa venezolana pero que residan del lado de la frontera colombiana.
Venezuela y Colombia comparten una porosa frontera de 2.219 kilómetros en la que existe una fuerte actividad de contrabando de todo tipo de productos.