Cuando en 1956 Juan de Jesús Arcila Tamayo se independizó de la empresa Tipografías Gráficas, apostó por su propio proyecto empresarial con 700 pesos de capital y seis décadas después, espera sumar ventas por 15.500 millones de pesos (6 % más que en 2015).
Se trata de Piloto SAS, una empresa familiar de comunicación gráfica, que genera 180 puestos de trabajo, ha exportado a Estados Unidos, Centroamérica, Perú, Ecuador y próximamente a Puerto Rico.
Arcila Tamayo reconoce que nunca fue a la universidad porque estudió hasta cuarto de primaria, pero su experiencia como mensajero, trabajador de impresión y jefe de taller, le dieron elementos suficientes para consolidar su propia empresa y dejarla posicionada en el mercado, ahora en manos de sus hijos.
“Mi universidad fue la experiencia, pero debo decir que en estos 60 años no hemos padecido problemas económicos. La claridad en los negocios, disciplina y orden son las claves”, agregó el hombre de 84 años de edad, que nació en el municipio de Marinilla, en la vereda “Montañita arriba”.
Con productos que van desde la impresión de cajas de cartón hasta empaques para congelados, Piloto atiende a clientes como Nutresa, Corona, Colanta, Avon y la FLA, entre otros.
El gerente actual es su hijo Luis Andrés, pero también está vinculado su otro hijo Juan Diego, además de su nieta Juliana, hija de este último.
“Mi mayor logro empresarial es que mi familia esté en el negocio de las artes gráficas”, concluye el fundador
