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El Banco de la República redujo la tasa de interés a 4,75 %, es decir lo hizo en 25 puntos básicos adicionales. Además, el Emisor fijó la meta de inflación en 3 % para 2018.
La decisión fue tomada por la mayoría de los miembros de la Junta, cinco a favor y dos en contra, estos últimos quienes consideraron pertinente mantener la tasa en 5 %.
Entre los aspectos más relevantes tenidos en cuenta fue la inflación observada, que “continuó siendo inferior a lo esperado por el mercado y por el equipo técnico del Banco, principalmente por el buen comportamiento de los grupos de alimentos y de transables sin alimentos ni regulados” sostuvo el gerente del Banco Juan José Echavarría.
Las expectativas de inflación, explicó, registraron cambios leves. De acuerdo con los sondeos que recopila el Banco, en diciembre de 2017 y 2018 bajaron y se sitúan en promedio en 3, 95 % y 3,49 %, respectivamente.
Así las cosas, “la convergencia de la inflación a la meta del 3 % podría ser más rápida, aunque la incertidumbre al respecto sigue elevada”, afirmó el gerente.
“Lo que vemos es una reducción significativa de tasas, 300 puntos básicos en el año, que pensamos van a impulsar la economía”, aseguró Juan José Echavarría.
Sobre el salario mínimo, el funcionario afirmó que “hemos pedido que se tomen en cuenta las buenas noticias inflacionarias. Nuestra reducción de tasas de interés es significativa y ya está impactando positivamente la economía”.
El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, vio positivamente la reducción de tasas y sostuvo que “esto va a servir para estimular la economía en fin de año (...), pero lo importante es que todo esto le debe llegar a los hogares”.
De la misma manera lo analizó Luis Fernando Ramírez, vicerrector de investigaciones económicas de la Universidad de la Salle, quien sostuvo que la decisión está en consonancia con dos tendencias: “el control inflacionario, estamos en el rango que el Banco aspira a tener este año y de cara a 2018 impulsar el consumo y jalonar el crecimiento económico, específicamente, la demanda de los hogares”.
No obstante, sostuvo que queda poco espacio para seguir en esa senda, pues las tasas siempre deben estar por encima de la inflación para tener los resultados positivos.
En la Junta Directiva también se tuvo en cuenta que el crecimiento al tercer trimestre fue menor al esperado (se situó en 2 % en vez de 2,3 %).
Esto indica “la persistencia de un crecimiento económico por debajo del potencial, por lo cual se espera que la subutilización de la capacidad instalada de la economía se siga ampliando”, dijo Echavarría.
Ramírez concluyó diciendo que esta es una “señal de que la recuperación económica está en la agenda del gobierno y del Emisor, y que ambas autoridades están alineadas”.