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La muerte del cantante de reggae Bob Marley ocurrió el 11 de mayo de 1981, aunque la causa inició tres años atrás. Cuando jugaba un partido de fútbol sufrió un pisotón en el dedo gordo del pie derecho. Ese día, el 26 de junio de 1978, comenzó lo que sería el final de esta leyenda.
Una lesión. Dolor. Mucho dolor. Los médicos le detectaron una gangrena debido a un trastorno en la parte superior de la uña. Le aconsejaron amputar el dedo para evitar una metástasis, pero se negó por cuestiones religiosas, los rastas no pueden quitarse alguna parte de su cuerpo. Entonces le llegaron las consecuencias por no realizarse la intervención quirúrgica: el cáncer se expandió y le costó la vida al músico jamaiquino. Falleció a los 36 años en Miami.
El podólogo mexicano Carlos Alberto Mondragón explica que los pies son una estructura conformada por 26 huesos y de ellos depende el correcto funcionamiento del resto del cuerpo, porque generan la locomoción humana. “Sus funciones son la capacidad de desplazamiento, pisar, saltar, pero lo más importante es que a través de la caminata ayudan al bombeo del corazón”.
También dice que a diario se exponen a enfermedades como fracturas, esguinces, inflamaciones, contagios o deformidades. La lista es larga y a veces no se les presta la suficiente atención. Se olvidan, solo se acuerda de ellos cuando el dedo meñique se golpea con la cama.
“Las enfermedades de los pies son muy variables, algunas se deben a la disminución del sistema inmunológico a través de los largos periodos de estrés y baja de defensas, lo cual los expone a hongos, dermatitis, traumas”, manifiesta Mondragón.
El ortopedista de la Universidad Nacional, Mauricio Villegas, explica que tanto el pie como el tobillo se exponen a padecer graves enfermedades por el solo hecho de caminar, trotar, saltar o el uso de un calzado no adecuado.
“Actualmente las enfermedades que más nos consultan los pacientes son las relacionadas con la fascitis plantar, que consiste en un dolor constante y agudo, se presenta más en las mujeres; pie plano en adulto; el dolor en el arco longitudinal plantar y en la parte posterior del tobillo con alteración de la forma del pie”.
El podólogo Mondragón asegura que es común que la gente se acostumbre a sentir dolores en los pies y esto lo que trae son resultados negativos para la salud. “Vivir con dolor en los pies puede generar trastornos a nivel articular, inflamación de los tendones o deformidades en los dedos. También puede ocasionar una reducción del tendón de Aquiles”.
Además, desmiente varios mitos: el cambio de temperaturas no genera lesiones en el sistema óseo, es falso que utilizar plantillas personalizadas ayuda a formar el arco de la planta del pie y tronarse los huesos no tuerce los dedos de esta parte del cuerpo.
Por su parte, el médico Miguel Farfán, especialista en Ortopedia y Traumatología de la Universidad del Rosario, indica que la desproporción del dedo gordo, conocida como juanete, es otra de las afectaciones más frecuentes que se registran en los pies por deformidad genética o uso inadecuado de zapatos ajustados en las puntas.
“Hay que controlar enfermedades que afectan a los pies como la diabetes porque los pacientes pierden la sensibilidad y muchas veces se entierran elementos, no se dan cuenta y sufren infecciones”.
“Las causas más frecuentes para que se enfermen los pies son cansancio por exceso de su uso; resequedad o la aparición de hongos en las uñas o bacterias muchas veces por descuido. Sin embargo, son la parte más resistente del cuerpo”, afirma.
Las partes de los pies que más se exponen a sufrir lesiones traumáticas son los dedos por caminar descalzos y golpearse contra muebles, algunas fracturas por caídas y los esguinces de tobillo.
Jenny Carvajal ofrece el servicio de pedicure hace 20 años en Bello, Antioquia. En todo este tiempo se ha cruzado con diferentes tipos de pies: resecos, uñas enterradas y hasta hongos.
“Luego de bañarse hay que secarse muy bien entre los dedos y aplicarse cremas humectantes para evitar la aparición de hongos. En la rutina para lograr una buena higiene es recomendable arreglarse las uñas cada 15 días”.
El médico Farfán añade que para tener un buen cuidado de las uñas se deben cortar rectas y no curvas. Y agrega: “Las plantas hay que revisarlas y usar talco si la persona tiene mucha transpiración para que la piel tenga un buen estado”. También menciona que se debe estar pendiente de los callos cutáneos porque de presentarse puede ser una señal de una posible alteración en la presión de los pies y en estos casos se requiere una valoración de un especialista.
Un dolor en los pies, así sea mínimo, es una alerta que indica que algo no está bien en esta parte del cuerpo. Por eso se recomienda asistir a un profesional de la salud para descartar alguna gravedad e iniciar un tratamiento si es necesario.
Según los expertos en Ortopedia, a partir de los 6 años es recomendable llevar a los niños al especialista, a esa edad ya se ha completado el ciclo de la marcha y se tiene una mayor capacidad para realizar un estudio biomecánico en piernas, rodillas, tobillos y pies para analizar si se encuentran en un estado adecuado.
Finalmente, aconsejan utilizar calzado cómodo que mantenga el arco plantar y evite los extremos como zapatos planos, altos o estrechos. De esta manera se puede prevenir inflamaciones en los tendones por excesos al caminar, en las actividades deportivas o al subir escaleras