Andar con la cara cubierta por el tapabocas, debido a la pandemia del covid-19, ya es parte del pasado en gran parte del país y en Medellín.
Desde ayer comenzó a regir la medida que elimina la obligación de exigir el tapabocas en los establecimientos comerciales y demás espacios cerrados. Los primeros beneficiados con esta determinación fueron los gremios económicos, quienes vieron como esto puede incentivar la llegada de más clientes.
María José Bernal, directora ejecutiva de Fenalco Antioquia, expresó que “es un parte de confianza enorme en el mercado tanto para los empresarios como para los consumidores. Agradecemos los esfuerzos que se han hecho para seguir en la senda de la reactivación económica”.
Los que se mostraron más felices con esta medida y comenzaron a ver los beneficios, fueron los responsables de los bares y restaurantes.
Juan Pablo Valenzuela, presidente de Asobares, dijo que es una medida que permite generar confianza para que asistan a los negocios de esta industria, una de las más golpeadas por las restricciones de la pandemia.
Aunque en un principio, el Ministerio de Salud no iba a dar vía libre para retirar este elemento de protección porque las cifras de vacunación aún le parecían insuficientes, finalmente dio el visto bueno y cada vez son menos las personas que usan el tapabocas.
Recordemos que en clínicas, hospitales y demás establecimientos de salud, así como en colegios, hogares geriátricos y medios de transporte públicos y privados se deberá continuar usando para controlar los contagios, según la cartera de salud.