En medio de la incertidumbre política que atraviesa del Pacto Histórico, uno de los precandidatos presidenciales de la colectividad, Gustavo Bolívar, aseguró que su contendor, el exalcalde de Medellín Daniel Quintero, estaría tejiendo acuerdos con sectores de la política tradicional, entre ellos la dirigente vallecaucana Dilian Francisca Toro.
“No hay claridad jurídica para hacer una consulta en dos días. Estamos en un limbo, porque al Pacto le dieron una personería ‘envenenada’: sí, pero no. Y mientras tanto, Daniel Quintero avanza en alianzas con políticos tradicionales, lo que para nosotros puede contaminar el proceso”, afirmó.
Bolívar sostuvo que Quintero se ha acercado a dirigentes regionales como Dilian Francisca Toro en el Valle del Cauca, la familia Torres en la Costa Caribe y varios alcaldes locales. Estos pactos, según él, podrían prestarse para que “estructuras con buses y maquinarias” incidan en una eventual consulta abierta.
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“Nos preocupa que esas alianzas adulteren la consulta, que está pensada como un mecanismo interno. Si es una encuesta, ahí no entran esas maquinarias y la competencia sería más limpia”, agregó.
El exsenador también fue tajante en señalar que, aunque aceptaría medirse con Quintero en una encuesta, no lo acompañaría en caso de que este resultara ganador. La razón: el juicio por corrupción que enfrenta el exalcalde de Medellín junto con parte de su gabinete.
“Hace tres años hice campaña contra Rodolfo Hernández por estar imputado por corrupción. Sería incoherente ahora apoyar a alguien en las mismas condiciones”, expresó Bolívar.
Mientras se define si habrá consulta, encuesta o incluso un aplazamiento para noviembre, la fractura en el Pacto Histórico se hace más evidente.
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Bolívar insiste en que el movimiento debe evitar “el doble rasero” en materia de ética política y que la figura de Quintero, con sus alianzas y procesos judiciales, genera más divisiones que consensos.
Entre tanto, el reloj electoral avanza: el 9 de noviembre inicia el calendario para la inscripción oficial de candidaturas al Congreso y la Presidencia, lo que obliga al Pacto a tomar pronto una decisión sobre el mecanismo que usará para escoger a su candidato en 2026.