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El olor a gasolina, el ruido de los motores y la adrenalina al máximo impregnan Contra lo imposible: Ford v. Ferrari, una película sobre carreras de autos cuyo protagonista Christian Bale defiende el valor excepcional y los importantes logros de las personas fuera de lo común.
“Los excéntricos son los únicos que hacen el progreso a lo largo de la historia de la humanidad”, asegura el ganador del Óscar por The Fighter (2010) que ahora encabeza junto a Matt Damon. La cinta se estrena el 14 de noviembre en salas.
Con unas espectaculares escenas de carreras y la dirección de James Mangold (Logan, 2017), cuenta la historia real del piloto Ken Miles (Bale) y del veterano diseñador de vehículos Carroll Shelby (Damon), que retaron en los años 60 con Ford a la todopoderosa Ferrari en las 24 Horas de Le Mans.
Esto contó el actor sobre su rol en la película.
¿Cuál es el desafío más importante para un actor cuando da vida a personas reales?
“Quieres averiguar todo lo que puedas. Una de las mejores partes de lo que hago es el acceso, las cosas que la gente me cuenta, el tiempo que pasan conmigo. Eso es un gran lujo que realmente valoro. Y la cosa es que nunca sabes lo que podrá ser interesante o útil. Pero no debes dejarte llevar por la fascinación de la investigación y creer que todo es esencial”.
¿Qué convierte a Ken en algo más que un apasionado por los autos?
“Hay una gran pureza en Ken, una gran humanidad. Es el conflicto de un hombre que es un gran padre de familia pero que trabaja en algo que es altamente peligroso (...). Hombres como los policías, los bomberos, los soldados, que hacen cosas donde la posibilidad de no volver es más elevada que en la mayoría de trabajos.
¿Cómo hace eso alguien? ¿Cuál es la fascinación y por qué arriesgarse así?
“Y luego está esta increíble historia verdadera de soñadores nada realistas: rechazan rendirse sin importarles las probabilidades. La verdad es que si hubieran perdido, habrían sido completamente ignorados y llamados excéntricos que no vivían en el mundo real. Es solo el éxito.
Los excéntricos son los únicos que hacen el progreso a lo largo de la historia de la humanidad. No son los ejecutivos, los empresarios, quienes son, por supuesto, esenciales como benefactores. Las carreras de autos, como hacer una película, requieren una gran cantidad de dinero y de fe. Estos tipos tenían que haberse dado por vencidos pero se negaron”.