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Danzan al ritmo de la música de un ruso, un colombiano, un polaco y un gringo

Espacios para Shostakovich, Luis F. Franco, Chopin y Cangelosi, espectáculo de hoy y mañana en el Metropolitano a las 8:00 p.m.

  • Wilson Torres, Érika Meneses, María Teresa Restrepo, Andrés Melchor, Osman Jaedy y Ahmaud Culver. FOTO Cortesía Danza Concierto
    Wilson Torres, Érika Meneses, María Teresa Restrepo, Andrés Melchor, Osman Jaedy y Ahmaud Culver. FOTO Cortesía Danza Concierto
17 de mayo de 2018
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Tensionado, sufriendo por afinar los detalles finales de su nuevo espectáculo, los de las luces, así estaba ayer Peter Palacio, el coreógrafo y director de danza, ocupado en solucionar detalles del espectáculo de hoy y mañana.

Un hombre de arte de su trayectoria, ¿todavía se angustia antes de una presentación?

“Creo que entre más viejo esté uno, es peor. Es más obsesivo y siente el peso de la responsabilidad por satisfacer las expectativas del público”, explica este artista que ahora propone Espacios para Shostakovich, Luis Fernando Franco, Chopin y Cangelosi.

Un ruso, un colombiano, un polaco y un estadounidense. Cuatro compositores disímiles aportan la música de este show.

“En este montaje no hay una trama dramática global —expone Peter—, sino cuatro actos independientes. Por eso se llama Espacios”.

Del título le agrada el contraste de los nombres. El de Luis Fernando Franco metido entre esos otros de sonoridad extraña. Un músico de gran trayectoria, con creaciones muy celebradas como Colombian Jazz Puerto Candelaria, El latir del río, y música de cine, incluida la de La vendedora de rosas. Y que ha estado en varias producciones de Danza Concierto, la compañía de Peter Palacio.

En la creación de un espectáculo como este, Peter primero se ocupa de estudiar las composiciones musicales y a sus creadores. También cómo era su época y el impacto o significado de sus creaciones. En las coreografías, los bailarines intervienen proponiendo movimientos.

El lenguaje de los cuerpos comunica escenas apasionadas y sensuales, dramáticas y poéticas, nostálgicas y racionales

Estas manifestaciones emocionales se refuerzan con las luces, en las cuales los colores son importantes.

“Una escena de amor apasionado, por ejemplo, se completa con luces rojas. Tal vez se puedan completar con verdes, pero las primeras no pueden faltar. Las luces blancas hablan de luz; las verdes, de esperanza”, explica el coreógrafo.

Peter Palacio destaca la combinación de música grabada y en vivo.

En cuanto a la música grabada, dice, hay de forma paralela a la del ruso, una percusión de un baterista norteamericano. Y en vivo, cuentan con el piano de Juan David Mora, del departamento de Música de Eafit, y la percusión de Daniel Duque, integrante de la Orquesta Sinfónica de la misma universidad.

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