Después de que suenen en el teatro Metropolitano La primavera y El otoño de Las cuatro estaciones de Antonio Vivaldi se leerá un texto. Una parte de él, una pequeña, en italiano, y la otra en español. Pero Mónica Lombana, quien tiene la tarea de hacerlo, no quiere contar cuál será el texto, la idea es que sea una sorpresa, dice ella.
De esa manera la Orquesta Filarmónica de Medellín le da apertura a su nueva temporada de conciertos. Esta vez con un concierto muy italiano, pues además de Vivaldi, sonarán también melodías de Verdi, Donizetti, Puccini, Ponchielli, Mascagni y Rossini.
Gonzalo Ospina, el solista que interpretará La primavera y El otoño, además concertino de la orquesta, cuenta que se les ocurrió que sería novedoso y llamativo involucrar invitados que formen parte del concierto en aspectos distintos a los musicales, “y se nos ocurrió la literatura, porque además de la música, la literatura italiana es música sin sonido”, señala el concertino.
Mónica, quien nació en Italia y enseña la lengua que se habla en su país, escogió lecturas toscanas porque es la región donde creció. Serán dos textos, el primero que no se conoce, y luego un fragmento de Malditos toscanos, de Curtzio Malaparte. “Esta es una idea estupenda, el lenguaje verbal y el musical tienen una relación estrecha por el arte que significan ambas disciplinas”, dice Mónica.
Para el maestro Francisco Rettig, quien dirigirá el concierto, la música y la literatura siempre se han complementado, “por lo que nos parece interesante ofrecerles esta nueva experiencia... Un novedoso ingrediente para nuestra apertura de temporada”.
Según Gonzalo, lo que se hará es romper el rito de la estructura formal del concierto, pero sin abandonar la idea de que el público está disfrutando de uno. Por eso, el entremés literario es corto, pero para Gonzalo, “alimenta a la gente de otro tipo de arte”.
La decisión de la orquesta fue hacer un primer concierto hoy, en el que estará Mónica Lombana, y otro el próximo 11 de febrero, en el que se interpretarán las dos estaciones restantes, con la participación del escritor Héctor Abad Faciolince.
Ese día también será italianísimo, con las oberturas de las obras Nabucco, Luisa Miller, I vespri siciliani y La forza del destino; además de los preludios del tercer acto de I lombardi y el de La traviata.
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