En los rincones cálidos de Almería, al sur de España, un artillero colombiano escribe su propia historia de redención y renacimiento. Luis Javier Suárez, el delantero samario de 27 años, está viviendo lo que muchos llaman una “segunda juventud” en la Liga Hypermotion, la segunda división del fútbol español. Su presente es brillante, sus números son de otro planeta, y su nombre empieza a sonar cada vez más fuerte como una alternativa real para la Selección Colombia que busca recuperar su rumbo hacia el Mundial de 2026.
Suárez, quien alguna vez fue una promesa del fútbol cafetero, parece haber encontrado en el Almería el escenario ideal para explotar todo su talento. En 37 partidos de liga ha marcado 27 goles, y si se suman sus actuaciones en la Copa del Rey, la cifra asciende a 31 anotaciones en la temporada. Con estos registros, se convierte en el máximo goleador colombiano en el exterior, superando ampliamente a otros delanteros que han sido habituales en las convocatorias de Néstor Lorenzo, como Jhon Jáder Durán, Rafael Santos Borré y Jhon Córdoba.
Mientras Colombia solo ha conseguido una victoria en sus últimos seis partidos de Eliminatoria y sufre para encontrar el gol, Suárez brilla cada fin de semana en tierras ibéricas. Su eficacia, madurez y crecimiento táctico lo ponen en una posición privilegiada para ganarse un lugar en la próxima convocatoria del técnico argentino, quien deberá anunciar su lista definitiva en menos de dos semanas. “Yo creo que este es mi mejor momento a nivel deportivo. Estoy mejor mentalmente, y eso lo demuestro en el campo. Hay detalles que antes no tenía: entender mejor el juego, tener más tranquilidad a la hora de definir”, confesó Suárez en una entrevista reciente con Blu Radio.
La Selección Colombia no atraviesa su mejor etapa y Lorenzo, que no suele mover mucho su grupo de confianza, podría verse obligado a replantear su nómina ante la falta de efectividad ofensiva y, especialmente, por la lesión de Santos Borré, quien apenas suma cuatro goles en el año con el Inter de Porto Alegre. La puerta parece entreabierta, y el ariete del Almería está listo para cruzarla.
Comparado con sus compatriotas, Suárez muestra una diferencia abismal: Durán acumula 21 goles entre el Al Nassr saudí y el Aston Villa inglés, mientras que Córdoba solo ha celebrado 11 veces con el Krasnodar de Rusia. El samario no solo supera a ambos en cifras, sino que transmite la sensación de estar atravesando un momento de plenitud y madurez. “Esa madurez futbolística y mental me está acompañando durante toda esta temporada. Se están haciendo muchos goles y se entiende mucho más el juego que antes. Eso se ve reflejado en los partidos”, destacó.
Su ambición, sin embargo, va más allá de los números. En sus palabras se percibe el anhelo profundo de volver a vestir la camiseta tricolor. “Cada jugador que ha pasado por la Selección Colombia tiene ese sentido de pertenencia. Nos sentimos orgullosos de serlo y de haber jugado; esperemos que pronto vuelva. Yo sigo trabajando y hablando dentro del campo”, expresó con humildad y esperanza.
Luis Suárez se perfila, desde el anonimato mediático de la segunda división española, como una de las grandes cartas ofensivas que podrían revitalizar a una Selección necesitada de goles, coraje y nuevas ideas. La última palabra la tiene Néstor Lorenzo, pero si hay justicia en el fútbol, el nombre de Suárez debería figurar entre los elegidos.
