viernes
7 y 9
7 y 9
Estar a 793.4 kilómetros de Pasto no fue impedimento para que Juan Daniel Velasco y sus compañeros de equipo celebraran, como es tradicional, el Carnaval de Negros y Blancos que, por estos días, se celebra en su tierra.
Uno a uno los integrantes del club Corsarios pintaron sus rostros de negro para hacer honor a la tradición que, en Medellín, arrancó aplausos de los asistentes al coliseo Iván De Bedout llegados a observar el desarrollo del juego entre los nariñenses y el club Horizonte de Rionegro del torneo de baloncesto del Festival de Festivales.
Al pisar el maderamen los nariñenses no solo sintieron el cariño de los aficionados sino un enorme orgullo, pues aunque lejos, hicieron honor a la celebración en la que año tras año han estado representando al club.
“Estas son nuestras costumbres y aunque ahora nos tocó en Medellín queríamos mostrar lo que hacemos en Pasto, porque no queremos dejar morir las tradiciones, lo que nos hace únicos”, resaltó Juan Daniel.
Claudia Ruiz, comunicadora del club, resalta también que los chicos querían demostrar su orgullo como nariñenses y por eso se pintaron sus caras, primero, de negro (el domingo) y, luego, de blanco (el lunes), pues así reza la costumbre, que ha pasado de generación en generación.
Al final, el marcador fue adverso, pero para Juan Daniel y sus compañeros es solo la motivación para hacerlo mejor en la segunda salida, pues el objetivo es alcanzar el título, y para eso apelan a la unión para salir adelante.
Espera, al igual que su ídolo, Stephen Curry, mejorar el promedio anotador y liderar a su equipo para alcanzar la final.
De Carepa con clase
En el babyfútbol, un equipo se robó las miradas, no solo por su calidad técnica sino por el estilo de los cortes de cabello en sus integrantes.
Susana Noguera, de la Agencia Anadolu, publicó, recientemente en la revista Arcadia, que “los peinados escondían los planes de fuga de los cimarrones, las semillas para asegurar su alimentación o metales preciosos para comprar su libertad”.
En la actualidad, las nuevas generaciones han adoptado la forma de peinarse en su uso diario o para eventos especiales, con la cual quieren rendir honor a sus ancestros, a sus raíces”. De ahí que, las integrantes del equipo del barrio Gaitán de Carepa decidieron hacerse sus hermosos trabajos en el cabello para mantener viva esa tradición de la comunidad afrodescendiente.
Algunas lo llevan en el color natural, otras más osadas le han impregnado tonos que contrastan y resaltan con su tez negra. En el debut, cayeron 1-0 ante Imer de Rionegro, pero las dirigidas por Jhon Émerson Palacios esperan recomponer el camino y no solo mostrar sus hermosas cabelleras sino llegar a la final.