Hace dos años Valentina Acosta empacó maletas y se radicó en México, esto no le ha impedido estar conectada con la televisión y el cine colombiano, y poder escaparse y encontrarse con su hermana, la también actriz Juanita Acosta.
Ahora, no sólo está feliz por volver a un protagónico en Colombia, con la nueva versión de “Azúcar”, que estrenó anoche el canal RCN, también por regresar a las historias costumbristas que le dieron identidad a la televisión colombiana, más cuando la producción se hizo en su tierra, en el Valle del Cauca.
¿Cómo vio el primer capítulo de ‘Azúcar’?
“Se ve el Valle del Cauca hermoso, con una fotografía espectacular y la historia es maravillosa, llena de magia, que es volver a las historias costumbristas y muy colombianas, algo diferente a lo que venimos viendo en la televisión colombiana”.
¿Qué personaje interpreta?
“Es la primera generación, en los años 50 con el inicio de la saga familiar cuando se desarrolla el tema de la maldición, donde interpreto a Matilde, quien es una mujer muy tradicional, de la alta sociedad, psicorrígida, controladora y cuando se le salen las cosas de la mano empieza a enloquecer y se le sale su lado más oscuro.
Es una mujer con muchos fantasmas en la cabeza, fanática religiosa que piensa que todo es un pecado, por lo que está llena de miedos e inseguridades. Bien compleja y eso me encanta”.
¿Cómo fue encarnar a
una mujer así?
“Matilde es un verdadero regalo para mí. Uno es actor porque le brinda la posibilidad de entrar en otros universos que es el ser humano, incluso en otras épocas como en este caso, con unas formas distintas de percibir el mundo distintas a las mías, que es de las cosas que más me gustan de la actuación y así poder entender más a los demás.
La gente me pregunta si es mala, y yo les digo que es una mujer compleja, con muchas cosas en la cabeza pero a la vez víctima de lo que era la época, con su machismo y el racismo que se vivía en ese entonces”.
¿Cómo prepara sus
personajes?
“Siempre preparo mis personajes con un maestro de la actuación. En este caso yo tenía los capítulos en los que actuaba de principio a fin, lo que no suele pasar en televisión, entonces pude crear una línea completa por dónde pasaba mi personaje, mientras que en otras producciones sabes cómo comienza, hacia dónde va, pero no el camino que recorre.
Desde la postura del personaje, con ese vestuario y su maquillaje, marcaban una línea, para ser una señora estirada, tan controlada como controladora, por eso trabajé este personaje desde la parte corporal, incluso desde la forma de sentarse y su mirada”.
¿Qué tal la vida en México?
“Voy y vuelvo, tengo mi casa allá, pero el año pasado pasé buena parte del tiempo en Colombia para la película y luego ‘Azúcar’, y ahora a la espera de los próximos proyectos, abriendo mercado en un país donde nos reciben muy bien”.
