El litigio entre las ligas deportivas de Antioquia y el Inder Medellín, que en principio tenía alcances locales, y es considerado un pataleo sin bases jurídicas por el ente municipal, puede llegar a esferas nacionales e internacionales.
Resulta que Álvaro González Alzate, presidente de la División Aficionada del Fútbol colombiano, como vocero y miembro del Comité Ejecutivo de la Federación, dijo que mientras a su afiliada, la liga antioqueña, le sigan lesionando sus intereses, la rectora del balompié nacional no tiene nada qué venir a hacer a Medellín. Se intuye que se refería a los partidos de las eliminatorias para el Mundial de Sudáfrica-2010 y al Mundial Sub-20 que organizará Colombia, en los cuales la capital de la montaña aspira a ser subsede.
Este es apenas un coletazo de los tantos que pueden surgir a raíz de la negativa de la Administración Municipal de un diálogo fluido y concertado que hace rato reclaman las ligas con la presencia del Alcalde y el Gobernador, por medio de su representante, Fedelian. Ni la mediación que intentó Acord Antioquia, el ente que agremia a los periodistas deportivos, surtió efecto hasta ahora. La actividad física sigue siendo un tema secundario para los mandatarios.
Las ligas deportivas lamentan que se haya desconocido su trayectoria al quitarles los escenarios que administraron durante muchos años y que ahora, amparado en el Plan de Desarrollo de Medellín, administrará el Inder.
Y mientras el conflicto se agudiza los deportistas padecen las consecuencias de un enfrentamiento infructuoso que pudo evitarse dejando atrás la soberbia y el orgullo de algunos funcionarios.
Pero no son sólo los más de 20 mil atletas afectados con el cese de actividades que se adoptó como medida de presión, pues los venteros ambulantes que rodean la Unidad Deportiva Atanasio Girardot lamentan su suerte por la disminución del clientes que asistían a las programaciones regulares de tenis de campo, atletismo, fútbol y otras disciplinas que decidieron parar sus torneos.
No queremos pensar, como se insinúa en algunos correos que llegan a la redacción, que de por medio haya intereses políticos porque sería imperdonable e irresponsable.
El Inder insiste en que el cambio de políticas de manejo de los escenarios no afectará a las ligas, mientras que éstas aducen lo contrario. Fedelian pide que si el Instituto de Deportes detectó irregulares, que las denuncie públicamente para que intervenga Coldeportes Nacional.
Señor Alcalde, usted que desde los claustros universitarios se distinguió por su afán al diálogo y la concertación, dele un tiempo al deporte, conozca los detalles a fondo, llénese de información, vale la pena. Hoy en día mucha gente se siente afectada e ignorada en este conflicto que ya tocó esferas nacionales.
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