Las instituciones educativas son reflejo de la sociedad. Allí conviven a diario cientos de futuros ciudadanos que más adelante serán los líderes de la comunidad y quienes a través de sus decisiones orientarán el futuro del país.
En aquel laboratorio social se puede observar una actividad que permite al pueblo, en este caso los estudiantes, elegir a las personas que los representan: personero, representante estudiantil y representante de grupo, personajes que forman parte del gobierno escolar.
La participación de los niños y jóvenes en aquellas actividades demuestran lo importante que es votar.
"Una de las prácticas más relevantes para fortalecer el ejercicio de la democracia en los centros educativos es la elección de estas figuras democráticas, que durante un año serán la voz de sus compañeros ante la comunidad educativa que de manera activa y efectiva participará en el mejoramiento institucional", indicó María Elena Uribe, directora de High School del Colegio Montessori.
La mirada del personero
Llegar a ese puesto es tener el máximo cargo en el gobierno escolar, algo que María Fernanda Buitrago, estudiante del Colegio Londres, tiene muy claro.
La antigua personera explicó que su cargo le enseñó dos cosas: a luchar por sus derechos y a escuchar a sus compañeros.
"Yo no veo el cargo como un puesto donde mando, sino donde escucho a las personas, sus ideas y problemas. Me gusta ser la voz de quienes tienen temor de expresarse", sostuvo María Fernanda.
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