"No hay derecho... respeten... el colmo... para sentarse a llorar... juega más el Deportivo "tapitas"... manada de troncos"... y los calificativos fueron muchos más a las afueras del Palogrande. El hincha salió dolido, con rabia, con tristeza... Del Once Caldas no quieren saber nada más.
El cuadro "albo" cerró de mala forma su campaña de local tras empatar 3-3 con Envigado. Ni siquiera al último de la tabla, el Once le pudo ganar. Sí, como para darle la razón al hincha, ¡no hay derecho!.
Apenas 134 personas se metieron la mano al bolsillo y pagaron la boleta; ni los 2.034 abonados que tiene el equipo para el Finalización fueron a ver la lánguida despedida de su equipo. La promoción de entran tres hinchas con una boleta no caló porque el clima tampoco ayudó. Y los que fueron salieron nuevamente decepcionados.
Muy rápido, el Once salió a buscar el resultado que le permitiera sumar esos puntos vitales en el promedio del descenso. Sin Álvarez en el banco, el técnico encargado, Humberto Sierra, apostó por un 4-2-2-2 con dos hombres en punta.
Al minuto 7, Sebastián Hernández filtró un balón para Mena y este fue derribado en el área. Fano cobró el penalti y 1-0. El "blanco" siguió encima de su rival y 13 minutos más tarde el juvenil Jessinger Jiménez aprovechó un error del arquero Mosquera y anotó el 2-0. Pero como muchos dicen por ahí, el 2-0 es el marcador más peligroso. Y así fue.
Envigado despertó
Para la segunda parte, Envigado entendió que era más equipo. Los "naranjas" comenzaron a tocar y allí marcaron diferencia. Morantes, quien jugó casi todo el partido lesionado, "les pintó la cara" a Nilson Cortés y Nicolás Torres, quienes nunca pudieron marcar al veterano volante, quien hizo lo que quiso en la cancha. De sus pies nació el primero para que Rodrigo Saraz marcara el 2-1 al minuto 11.
El "blanco" no reaccionó y Dorlan Pabón empató tres minutos más tarde. Mientras la visita celebraba, en la tribuna, los pocos hinchas no daban crédito a lo que pasaba. En la popular, Holocausto comenzó a presionar y a pedir "huevos". Pero los que sí metieron fueron los antioqueños que nuevamente convirtieron con Jorge Horacio Serna tras un tiro de esquina. 3-2 y, por lo hecho por ambos equipos en el terreno de juego, estaba bien.
Cuando los propios hinchas "albos" comenzaron a hacerle el "ooole, ooole" a su equipo, Fano -lo único rescatable del "blanco" aprovechó un centro de Dayron Pérez y marcó el 3-3.
Porque Envigado fue incapaz de convertir tres opciones claras de gol en los últimos minutos, el ridículo para el Once Caldas no fue mayor. Sólo queda Medellín para que esto se acabe.