Un recorrido de 90 minutos realizado ayer por calles de Medellín, sirvió a este diario para documentar por lo menos en 10 casos el incumplimiento de la prohibición de llevar parrilleros o de la norma que obliga a conducir con casco. En varios casos se incumplieron ambas normas.
Con la prohibición de movilizar parrilleros hombres vigente hasta mañana —mientras las autoridades en el Aburrá deciden si se le da continuidad a la medida— La Mota, El Rincón, Los Alpes, Belencito, San Javier y La América son algunos de los barrios de Medellín donde algunos motociclistas hacen caso omiso de la restricción con igual frecuencia que no usan casco al conducir.
El secretario de Seguridad de Medellín, Iván Darío Sánchez, señaló que se están adelantando análisis técnicos sobre la efectividad de la medida restrictiva. Entre hoy y mañana las autoridades en el Valle de Aburrá deben tomar una decisión en el sentido de prolongar la prohibición o permitir que ésta llegue a su fin a partir de las 0:00 horas del 1 de febrero.
La medida, de carácter transitorio, que según las autoridades apunta a disminuir delitos como los hurtos a personas y de carros o motos, así como también el homicidio, se implementó el 30 de noviembre de 2012 y desde entonces se ha prolongado en tres ocasiones, de manera que está vigente hasta este 31 de enero (ver recuadro Antecedentes).
"Nuestra percepción de la medida ha sido positiva. Sin embargo estamos haciendo los respectivos análisis para tomar una decisión fundamentada en cifras reales", señaló Sánchez.
Frente al incumplimiento de la restricción, el funcionario señaló que justo por estos días la Administración ha tratado el tema con la Policía Metropolitana. "Pedimos mayor operatividad, para evitar estas situaciones", precisó.
Pese a que la medida ha sido entendida como positiva por alcaldes, secretarios de Gobierno e incluso de Tránsito en municipios del área metropolitana, han trascendido hechos en los cuales su vigencia no ha sido suficiente para detener el crimen.
Una menor de 16 años fue asesinada este 27 de enero por un sicario que se desplazaba como parrillero en moto, cuando llegaba al colegio Héctor Abad Gómez, en el barrio Boston. Así mismo, el pasado 15 de enero, afectados reportaron un asalto múltiple en el que intervinieron seis hombres en cuatro motos en la vía de Las Palmas, a la altura de la loma de El Indio.
A estos hechos se suma el asesinato el 26 de diciembre de 2013 del médico Daniel Areiza, de 29 años, a quien según las autoridades le disparó el parrillero de una moto en un intento por robarle la suya, cerca de la sede de la EPS Sura en la avenida Los Industriales, donde laboraba. Justo este caso motivó que se endureciera la medida en Medellín, prohibiendo de nuevo la movilización, incluso, de parrilleros del mismo núcleo familiar.
El secretario de Tránsito de Bello, Édgar Callejas, es uno de los funcionarios en el Aburrá que considera que el resultado de la medida ha sido positivo. Señaló que en su municipio se realizan en promedio seis operativos de control diarios, dos de ellos dedicados, de manera específica, a sancionar el incumplimiento de la restricción.
Entre los motociclistas en desacuerdo con la medida, Mauricio Flórez, fundador del grupo No más robo de motos, reiteró en que el impacto ha sido negativo en la economía familiar para cerca de 500.000 propietarios de motos que estima hay en el Valle de Aburrá
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