Envueltos completamente en papel de aluminio dos presuntos ladrones se camuflaron para perpetrar el robo del Banco do Brasil, en Praia Grande. Con este inusual atuendo, los sospechosos intentaron burlar las cámaras y sensores de movimiento que componían el sistema de alarmas de la sucursal.
Así lo aseguró la policía militar encargada de la vigilancia del sector en Santa Catarina. Que precisó además que en medio de la operación criminal, los saqueadores no se percataron de la ineficacia de su indumentaria que fue registrada por el circuito de cámaras monitoreado por una vigilancia centralizada.
“Pensaron que la alarma no los detectaría”, aseguró Cristian Dimitri, portavoz de la policía de Santa Catarina a CNN. ”Cuando el sistema central de monitoreo del banco los vio en la pantalla, llamaron a la policía inmediatamente”, agregó el oficial.
“Encontramos un taladro eléctrico y otros instrumentos que nos llevan a creer que estaban buscando entrar en la caja fuerte, sin embargo, se fueron con las manos vacías”, dijo Dimitri.
Según la hipótesis que manejan las autoridades hasta ahora, se trata de un trabajo en equipo entre más de dos personas, que contaban con vigías y avisaron de la llegada de los carros de policía a la escena del hurto.
Hasta ahora sólo una persona ha sido detenida y se espera su declaración para esclarecer los hechos.