Un cohete de la empresa aeroespacial Space X explotó ayer durante un despegue realizado en Cabo Cañaveral (Florida), en las instalaciones que la firma tiene junto a la estación espacial Kennedy, de la Nasa.
Space X explicó en un comunicado que se produjo una “anomalía” en la plataforma de despegue que provocó la “pérdida del cohete y su carga”, el satélite Amos 6. Por procedimiento estándar, en la plataforma de despegue no había personal y “no se produjeron heridos”, indicó la firma.
La empresa Space X indicó que a las 09:07 a.m hora local, mientras se realizaba la “habitual prueba estática de despegue”, se produjo una anomalía en la “parte superior del tanque de oxígeno” mientras se cargaba de combustible el cohete.
“Continuamos revisando los datos para identificar la causa y se informará cuando haya novedades disponibles”, indicó la firma a través de su cuenta oficial en Twitter.
El consejero delegado y fundador de SpaceX, Elon Musk (también propietario de la empresa de autos eléctricos Tesla), usó la misma red social para destacar que la causa de la explosión es aún “desconocida”, pero aseguró que darán más detalles “pronto”, según avancen las investigaciones.
El satélite que llevaba iba a proporcionar servicios de comunicaciones en una zona desde la costa de EE.UU. a Europa, África y Oriente Medio, así como reforzar las necesidades de comunicaciones del gobierno israelí.
Amos 6 iba a ser además el primer satélite que tenía previsto usar la red social Facebook y formaría parte de su campaña para llevar, desde el espacio, internet a zonas remotas.
Esta no es la primera vez que este tipo de cohete sufre una explosión, después de la registrada en junio de 2015 poco después de iniciado su despegue.