viernes
7 y 9
7 y 9
Confirmado: régimen de Maduro y oposición venezolana retoman diálogos en dos días
Los actores políticos de ese país volverán a las conversaciones para buscar una salida negociada a la crisis. La cita será este viernes 25 de noviembre.
-
El líder del régimen de Venezuela, Nicolás Maduro, y el opositor Juan Guaidó. FOTOS: Twitter @NicolasMaduro y @jguaido
23 de noviembre de 2022
bookmark
Venezuela otra vez buscará una salida negociada a la acentuada crisis política del país. El régimen de Nicolás Maduro y la oposición venezolana se volverán a sentar en la misma mesa este viernes 25 de noviembre para retomar las conversaciones.
El anuncio fue hecho por el presidente Colombia, Gustavo Petro, quien ha sido una ficha clave para que Maduro vuelva a tener una silla legítima en la política internacional. Es más, ese acercamiento se habría empezado a articular con su visita a Caracas.
La comunicación del mandatario colombiano se dio en un breve trino: “Este 25 y 26 de Noviembre se reinician los diálogos entre el gobierno de Maduro y la oposición venezolana”. Hasta ahora ni el oficialismo ni la oposición han dado más detalles de esa cita.
Esa reactivación de la mesa se da días después del encuentro de Petro con su homólogo de Francia, Emmanuel Macron, con quien habló de la coyuntura política de Venezuela. La situación del país también ha sido un tema recurrente en las reuniones con Estados Unidos, país para el que Maduro es un dictador.
Las conversaciones entre Maduro y la oposición se dan ad portas de las elecciones presidenciales de 2024, unos comicios que, por ahora, generan dudas en un sector de la población porque ya el cacique chavista ya aseguró que planea estar en el poder hasta 2030.
Es más, las elecciones más recientes –las regionales de 2021– tuvieron una baja participación de candidatos de opositores porque ese sector aseguró que no había garantías para una jornada transparente. ¿Con la medicación de Petro se articularán unos comicios limpios?
Ese es el interrogante que permea la política de Venezuela, en medio de un claro escepticismo de los ciudadanos que llevan más de dos décadas viviendo bajo las reglas de juego de las administraciones chavistas.
Sin embargo, el caso de Nicolás Maduro es particular. Él se hizo elegir en 2013 tras la muerte del expresidente Hugo Chávez –de quien era su vicepresidente– y a pesar de que la Constitución le impedía ser candidato. Su misión en ese entonces solo consistía en tener un mandato de transición y convocar a elecciones, pero no la cumplió.
Luego volvió a ser candidato presidencial en 2018 en unos comicios que no contaron con participación de la oposición que cuestionaba que Maduro apareciera diez veces en el tarjetón, entre otras irregularidades que permearon esa contienda que fue desconocida por un sector de la comunidad internacional y los mismos opositores.
En teoría, ese periodo en el Palacio de Miraflores terminaría en 2024, para cuando el Partido Socialista Unido de Venezuela y los múltiples líderes de la oposición alistan sus fichas –y sus quejas– para una cita en las urnas que aún están en construcción.
El régimen de Maduro está acusado de violar los Derechos Humanos de los venezolanos y en su contra hay un proceso abierto en la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Es más, Human Rights Watch ya pidió que el deshielo en la política con Miraflores no deje a un lado la situación humanitaria del país.
Pero para una agenda de diálogo la oposición también debe resolver sus propias fracturas entre los bandos del partido Primero Justicia (que lideran Henrique Capriles y Julio Borges), el de Voluntad Popular (de Guaidó, Leopoldo López y otros) y hasta el ala radical del Vente Venezuela de Maria Corina Machado. ¿Qué tan articulada está?
Mientras Petro facilita los diálogos de Maduro con la oposición, el régimen también es el puente de las conversaciones de paz de la guerrilla del ELN con la Presidencia de Colombia. Dos agendas que ponen a la Venezuela de Maduro en la mira del mundo democrático.
Te puede interesar
El empleo que busca está a un clic
