La vereda El Vergel, en San Antonio de Prado, Medellín, avanza en un proyecto pionero que convierte los residuos sólidos en oportunidades de educación, autogestión y cuidado ambiental. Se trata del nuevo centro de experiencias vivas, impulsado por la comunidad organizada en la Corporación Mujeres y Familias El Vergel (Cormufave) y por la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), que busca fortalecer la resiliencia local y proyectar a la región como un referente en agroecología y sostenibilidad.
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El proyecto nació en medio de la pandemia, cuando las familias del sector empezaron a reunirse para crear huertas comunitarias y promover la formación social y ambiental. Hoy, esas iniciativas se consolidan gracias a la articulación con la Facultad de Minas de la UNAL, bajo el liderazgo de la profesora Luz Dinora Vera Acevedo, y al apoyo de la Redvar, el grupo de investigación GEYMA y empresas aliadas como Pirsa. “El propósito no es solo enseñar técnicas para el manejo de residuos o la creación de huertas, sino construir una red de conocimientos compartidos que permita a la comunidad tomar decisiones informadas sobre su futuro, fortalecer sus capacidades autogestionarias y asegurar que sus prácticas sean sostenibles tanto a nivel ambiental como económico”, explicó Vera Acevedo.
Y es que el centro está concebido como un espacio abierto para experimentar y aprender, en el que los habitantes adquieren herramientas para ser autosuficientes y al mismo tiempo cuidar del medioambiente. “Este centro será un lugar para experimentar, aprender y transformar. Queremos que las personas se apropien de los conocimientos y las herramientas necesarias para ser autosuficientes en sus hogares y para aportar a la salud del medio ambiente”, afirmó la investigadora.