Los resultados de Cementos Argos en el primer semestre de este año fueron inferiores a lo que esperaban los analistas económicos, pues las ventas de la cementera cayeron un 3,9 % mientras la utilidad neta del ejercicio se contrajo en un 84,5 % (ver gráfico).
Juan Esteban Calle, presidente de esa filial del Grupo Argos, reconoció que los números estuvieron afectados, principalmente, por la dinámica económica colombiana que representa el 30 % de la operación.
“El cierre del primer semestre se ve menos bueno que igual periodo de 2016, pero el segundo trimestre (abril-junio) mostró un mejor comportamiento con una utilidad cercana a los 50.000 millones de pesos, frente a la pérdida de 47.000 millones observada entre enero y marzo”, señaló.
El diálogo con EL COLOMBIANO, el empresario también explicó que los resultados estuvieron impactados por una serie de gastos no recurrentes que se están contabilizando por el proceso de transformación productiva que ejecuta la empresa, por unos 50.000 millones de pesos.
Además, sostuvo que los precios del cemento en Colombia cayeron un 28 %, pues mientras una tonelada del material en Estados Unidos vale de 130 dólares, en el país el costo es de 80 dólares.
Pero, ¿qué está presionando esa reducción en los precios del cemento? Calle insistió en que la causa es la importación descontrolada del material de construcción que pasó de 40.000 toneladas en 2010 a 1,7 millones de toneladas el año pasado.
“Es un cemento que llega de países que subsidian costos de la energía, manejan tasas de cambio, y aquí no exigimos un reglamento técnico para ese producto”, añadió.