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Este es el salvavidas laboral para mayores de 50

Tras la aprobación unánime del Senado, ahora solo falta la firma del presidente Iván Duque para que el proyecto de “último empleo” sea ley.

  • La plenaria del Senado aprobó el proyecto de ley “del último empleo”, el cual busca mejorar las condiciones laborales de los mayores de 50 años. FOTO: COLPRENSA
    La plenaria del Senado aprobó el proyecto de ley “del último empleo”, el cual busca mejorar las condiciones laborales de los mayores de 50 años. FOTO: COLPRENSA
Este es el salvavidas laboral para mayores de 50
22 de junio de 2019
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Cerca de 14 millones de colombianos se beneficiarían del proyecto de ley “del último empleo”, el cual promueve la contratación de los hombres mayores de 50 años con el fin de mejorar sus condiciones laborales.

Este segmento poblacional enfrenta dos problemas. Por un lado, no se vincula al mercado formal con facilidad y a, raíz de esto, se le dificulta la posibilidad de obtener una pensión por vejez.

En efecto, según Iván Jaramillo, director del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, la tasa de desempleo de esta población es cercana al 20 %.

La iniciativa —aprobada el miércoles pasado por la plenaria del Senado— fue propuesta en 2017 por la exsenadora del Centro Democrático Nohora Stella Tovar. En ella se establece un alivio tributario del 9 % sobre el impuesto de renta para las empresas que contraten personas en este segmento. El descuento es equivalente a los aportes parafiscales (Sena, Icbf y caja de compensación) que el empleador paga por cada trabajador.

De acuerdo con el senador de Cambio Radical, Richard Aguilar, ponente del proyecto, este “beneficiará especialmente en el área de servicios. También hombres sin estudios superiores o con técnicas o tecnologías, porque las empresas muchas veces prefieren vincular a jóvenes”. Así mismo, agrega que los campos administrativos serían los más receptivos al incentivo.

La medida se suma a otras similares que ya han impactado a otros segmentos. Por ejemplo, la ley del “primer empleo”, aprobada en 2010, que otorga beneficios iguales a los del presente proyecto, pero a personas menores de 28 años y sin experiencia laboral, así como a las desempleadas mayores de 40 años (ver Antecedentes).

Es importante aclarar que esta iniciativa contiene un par de requisitos para la aplicación del beneficio fiscal. En primer lugar, la empresa debe demostrar que aumentó el número de trabajadores, así como la nómina (el salario total de estos), con respecto al “mes de diciembre del año gravable inmediatamente anterior al que se va a realizar el correspondiente descuento”, según se lee en el documento. El beneficio solo tiene una vigencia de dos años luego de contratar al empleado.

Efectos

El proyecto tiene gran impacto en el país ya que el panorama laboral para los adultos mayores no es nada bueno. De hecho, en tres renglones relevantes (empleo, formalidad y pensiones) se tienen números rojos.

Por un lado, la tasa de desempleo de este grupo suele duplicar la cifra general, ya de por sí alta: 10, 3 % para el mes pasado, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).

Por otra parte, los pocos puestos disponibles son precarios. De acuerdo con datos de la Misión Colombia Envejece, el 80 % de las personas mayores de 50 años económicamente activas trabaja de manera informal: alrededor de 3,24 millones. Según la entidad, “las de menores ingresos deben hacerlo debido a la falta de pensiones y/o de ayuda familiar”.

Este último punto, el pensional, es el otro factor que contribuye a la condición deficiente de la vejez en el país: apenas un 30 % de la población de 60 años en adelante (1,72 millones) recibe una pensión contributiva, según el estudio “El mercado laboral y las personas mayores”, realizado por la Misión Colombia Envejece.

Jaramillo añade que “la estabilidad laboral en Colombia es muy débil en el segmento de los mayores, gracias a la política de libre despido a cambio de una indemnización”. Y agrega que la ley por sí sola no producirá ningún cambio. “Si no hay conexión con políticas públicas y activas de empleo, lideradas por el Ministerio del Trabajo y el Servicio Público de Empleo, pues la ley estará ahí, pero sin efectos deseables”, concluye.

Ya en el país se ha comenzado a trabajar en la atención de este grupo poblacional con medidas como el fuero de prepensionado, una protección ante el despido de empleados que están a tres años, de edad o de tiempo de servicio, de recibir su pensión.

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